Nostradamus y la continua manipulación

Ningún «profeta» de cualquier índole tiene más predicamento que Miguel de Nostradamus, salvo que el discípulo de Jesús al que se le atribuye la autoría del Apocalipsis, y del mismo Jesús, que pronosticó fallidamente al año 1000, como el FINAL de nuestro mundo.

Sus profecías, escritas en una forma dubitable y para nada precisa, solieron ser interpretadas como profecías cumplidas, luego de producido el hecho- magnicidios generalmente-, ampliamente rodeado de posibilidades de real ocurrencia.

Todas sus reconvenciones se hallan teñidas del conocimiento de su época. No ha podido ir más allá de explosiones, demoliciones, envenenamientos y matanzas. Nunca ha podido describir los métodos de las mismas, ni sus causas.

La problemática extraterrestre está fuera, en forma total de su consideración, solo habla de humanos de diferentes religiones, de «buenos» y de «malos».

Según sus exégetas, la caída del papado equivaldría al fin del mundo, las luchas religiosas abarcarían todo y los conocimientos técnicos, no serían importantes-como para la mayoría de los ecologistas actuales que no tiene mucha idea de nada moderno. Continuar leyendo «Nostradamus y la continua manipulación»