Las cámaras de una estación petrolera graban un «monstruo marino desconocido»

Los científicos estiman que el hombre, posee conocimiento de no más de un 5% o un 7% de los misterios que ocultan las profundidades de nuestros océanos.

Se cree que el Universo del fondo marino podría albergar grandes cantidades de metales preciosos como el Oro, y muchas otras riquezas que serían suficientes como para eliminar definitivamente la pobreza del mundo.

Pero también existen miles de criaturas desconocidas recorriendo los océanos de nuestro Planeta. Un ejemplo de ello, es éste misterioso monstruo que fue grabado por las cámaras de una estación petrolera próxima a Gran Bretaña en abril del éste año.

La grabación, muestra una criatura de aspecto gelatinoso e inmensas proporciones nadando cerca de la cámara hasta que finalmente desaparece a lo lejos, entre la turbulencia oceánica.

La explicación científica a la fecha, indica que se trata de una medusa rara, conocida como la Deepstaria reticulum. Aunque bastante diferente a otras conocidas, los expertos aseguran que en el video, se alcanzan a ver los órganos sexuales de la criatura, de similares características a las de las meduzas gigantes llamadas así.

De igual forma, el extraño animal no dejó de asombrar incluso hasta los expertos, que creyeron desde el principio estar ante la aparición de un ejemplar no catalogado por la ciencia.

Descubren agujeros negros en el Océano Atlántico

Un estudio descubre ocho equivalentes matemáticos en la Tierra a los agujeros negros del espacio. Al igual que en los fenómenos cósmicos, en los terrestres nada de lo que entra sale. El hallazgo ayudará a comprender mejor el movimiento de los materiales en los océanos.

Expertos del Instituto Federal Suizo de Tecnología y la Universidad de Miami, en Estados Unidos, revelaron que los vórtices del Atlántico Sur actúan de manera muy semejante a los agujeros negros del espacio.

Según informa Russia Today, el equipo de científicos descubrió que el borde de estos vórtices está representado normalmente por un ancho cinturón de una sustancia brillante, que se asemeja a la esfera de fotones que rodea a los agujeros negros sin entrar en los mismos.

Los especialistas demostraron científicamente esta semejanza al describir el comportamiento de los vórtices en los fluidos turbulentos utilizando los mismos principios matemáticos que describen el fenómeno de los agujeros negros, regiones del espacio tiempo en las que la gravedad es suficientemente fuerte para evitar que ninguna sustancia se escape, incluida la luz.

De acuerdo con el portal Technology Review, el estudió evaluó las corrientes en el suroeste del océano Índico y el sur del Atlántico, donde existe un fenómeno conocido como «la fuga de las Agujas», corriente que se vuelve sobre sí misma, creando de vez en cuando remolinos en la zona meridional.

En su investigación, el equipo de expertos empleó imágenes de satélite del sur del océano Atlántico captadas entre noviembre de 2006 y febrero de 2007 para localizar posibles análogos de agujeros negros.
Como resultado, encontraron durante este período un total de ocho fenómenos con posibilidad de ser denominados agujeros terrestres.

Este análisis podría tener implicaciones importantes para entender cómo las corrientes oceánicas transportan material, pues dado que todo lo que entra en estos agujeros negros ya no puede salir, deben poder atrapar cualquier basura, aceite o incluso la propia agua, moviéndola de manera coherente a grandes distancias.

La investigación también plantea la posibilidad de que se produzcan análogos de agujeros negros en otras condiciones naturales, como en los huracanes, e incluso en otros objetos espaciales. Por lo tanto, según sugieren los científicos, la Gran Mancha Roja de Júpiter, tormenta gigante en la atmósfera del planeta, podría ser el más famoso agujero negro del sistema solar.

Un Pyrosoma Gigante de 30 metros de largo

Los Pirosomas son colonias de pequeños animales que forman tubos huecos y sellados en un extremo. En el siguiente video filmado por  Michael Baron se puede ver un Pirosoma espinoso, cuyo tamaño puede llegar a ser de hasta 30 metros de longitud.

Todas éstas especies son animales de mar abierto y rara vez se acercan a la orilla, y todos son coloniales, aunque algunos pueden llegar a ser solitarios.

Se mueven con movimientos ondulantes como verdaderas serpientes marinas, de forma lenta y armónica y en general son fluorescentes. Estos animales fueron filmados en la península de Tasmania, Australia – Una de las pocas áreas en el mundo donde existe una amplia gama de plancton gelatinoso oceánico, incluyendo ctenóforos y medusas.

En el año 1980, Roy P. Mackal propuso una nueva especie de serpientes marinas: El pirosoma [Pyrosome], una colonia tubular de tunicados que actúan unidos por su forma cónica, fosforescente, y que puede medir varios metros de longitud.