Osama bin Laden; El Asesinato de la moral

El 2 de mayo de 2011, el líder musulmán de la red terrorista Al Qaeda, Osama bin Laden, fue asesinado en un mega operativo secreto dirigido por el gobierno de los Estados Unidos.

Según la teoría oficial, bin Laden fue el principal precursor del atentado terrorista a las Torres Gemelas el 11 de septiembre del año 2011. Hecho que no duró en ser confirmado por el mismo bin Laden algún tiempo después.

A más de 60 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, quienes poseen el “poder”, ya sean fundamentalistas o demócratas, no dejan de cercenar la “moral” que diera origen a sus creencias y de la cual tanto alardean.

La moral, es para la filosofía el medio a través del cual los hombres pueden trascender, incluso más allá de la muerte. Sea cual sea la creencia religiosa o dogmática, la moral es el parámetro a través del cual se miden nuestros actos y el motivo por el cual somos mejores o peores personas. En resumidas palabras es lo que indica si algo está bien o está mal, según nuestras creencias adoptadas.

Podemos ver con claridad que ninguno de los actores de ésta historia sin final permanecen fieles a sus ideales más profundos. A su moral. Si Mahoma y Jesús vivieran en la actualidad, ambos profetas contemplarían con asombro que su contribución al Universo de las ideas es utilizada diariamente en una batalla sin sentido entre quienes poseen el poder y ejercen el control del mundo.

Me será muy difícil tratar de explicarle a un niño que el acto de matar es considerado “malo”, mucho más ahora, que los Estados Unidos ha “matado” a una persona en presencia de toda su familia con el único motivo de “hacer justicia”. Al menos, antes nos quedaba el aliciente de que los musulmanes eran “malos”. Mucho más difícil será para mí explicar que dicha “justicia” va mutando su forma y su significado, según el interés involucrado. Pues, como si se tratara de la teoría de la relatividad de Einstein, recientemente demostrada por la NASA, ya no existe una moral absoluta. Solo existen intereses y sofismos que contribuyen a mantener el orden mundial acotado entre los límites de una curva de Gauss.

La clave del misterio de Poincaré

Resolvió la conjetura de Poincaré intentando explicar como Jesús caminó sobre el agua.

El matemático ruso Grigori Perelman, explicó en una reciente entrevista publicada por el diario Komsomolskaia Pravda, que cuando resolvió la famosa conjetura de Poincaré, lo hizo intentando comprender cómo Jesús caminaba sobre las aguas.

El famoso matemático, quien afirma estar en «desacuerdo» con la comunidad matemática, habría resuelto uno de los problemas más enigmáticos de la historia de las matemáticas, postulado por el francés Henri Poincaré en el año 1904, y habría renunciado al premio de un millón de dólares que otorga la Clay Mathematics Institute (CMI) por la solución del problema.

«Yo se como gobernar el mundo… Porqué tendría que correr detrás de un millón» – Fueron sus palabras a la hora de rechazar la cuantiosa suma de dinero.

El matemático, de 44 años, que vive con su madre en un barrio periférico de San Petersburgo, trataba de averiguar la velocidad a la cual Jesús debía desplazarce por el agua para evitar hundirse, y sin querer descubrió la solución a uno de los problemas que la matemática no había podido solucionar hasta el momento.

Saber es no creer…

Muchas veces me preguntan, como si fui seminarista hoy no creo en dios, o al menos en una religión.

Solo atino a contestar con preguntas:

  • ¿Porqué las cosmogonías modernas no necesitan de un hacedor?
  • ¿Porque nada razonable incluye la idea de la deidad?
  • ¿Porqué en las relaciones causa y efecto, desaparece la noción del pecado?
  • ¿Porque es raro encontrar un científico de fuste que en la privacidad se declare creyente?
  • ¿Porqué las religiones en su mayoría, ni quieren oír hablar de terapias de vidas pasadas?
  • ¿Porqué las iglesias están vacías?
  • ¿Porqué a mayor ignorancia más fanatismo?
  • ¿Porqué los servicios religiosos son casi totalmente escuchados por viejas matronas?

Hay un puñado más de preguntas, pero contestando estas, sabrán certeramente, porque saber nunca será creer.

Es así que el creacionismo está muriendo, el Islam es fenómeno de fanatismo y terrorismo y la Iglesia cristiana tiene en el actual Papa, a su último exponente, vaticinado por dos creyentes: San Malaquías y Nostradamus.

He hecho la regresión a las vidas pasadas, experiencia siquiátrica, científica y verificable en sus curaciones y en sus revelaciones, en tanto las vidas anteriores se hayan vivido en lugares muy civilizados, con registros diversos y construcciones, ropajes y objetos verificables.

En nuestro espacio-tiempo, nuestras acciones se desarrollan dentro de la férrea causa y efecto. No hay lugar para “premios y castigos” que relatan las religiones. Nuestro accionar es otra cosa, con todas las implicancias que esto conlleva.

La conexión con el llamado libro akáshico, permite expandir la mente a otras dimensiones, más allá de las frecuencias, y mucho de lo que se recoge, son revelaciones que al pasar el tiempo, van sucediendo. (Dentro siempre de la mayor o menor habilidad del humano que pregunta.).

Sin embargo, aquí tampoco hay un dios, ni esperamos que exista, porque no es necesario, porque de existir, no sería perfecto, nuestra existencia coarta la perfección de todo. La creación sería un acto de imperfección invalidante, en fin, se lo mire por donde se lo mire, la noción de dios, ya no tiene cabida.

por Manlio E. Wydler