La teoría de Darwin podría ayudar a encontrar vida extaterrestre

Un grupo de astrobiólogos de la NASA están utilizando como sustento teórico axiomático, la teoría de la evolución de las especies con el onjetivo de encontrar planetas cuyas condiciones puedan ser las adecuadas para el desarrollo de la vida.

En éste contexto, la famosa teoría de Darwin podría resultar vital en la búsqueda de vida extraterrestre. En un discurso realizado en el 150 aniversario de la publicación de El Origen de las Especies, científico de la NASA dice que la evolución darwiniana será la fuerza motriz de la vida en cualquier parte del universo, y debemos utilizar sus predicciones para decidir dónde buscar. [Fuente de la Noticia : Telegraph]

Imagen (copyright: Lynette Cook | URL del Autor)

Vida extraterrestre : La paradoja de Fermi

Cuando el físico Enrico Fermi se encontraba trabajando en el Proyecto Manhattan, cuyo fin era el desarrollo de la bomba atómica estadounidense, enunció la que hoy se conoce como Paradoja de Fermi.

El científico estaba atormentado por la contradicción que existe entre los cálculos que demuestra que hay una enorme cantidad de planetas capaces de alojar civilizaciones inteligentes en el universo, y la ausencia de evidencia de dichas civilizaciones. ¿Es la raza humana la única civilización avanzada en el Universo?

Una de las cuestiones que más inquietan a la humanidad es la existencia (o no) de otras civilizaciones en el Universo. A lo largo de los siglos, hemos pasado de sentirnos que eramos el centro del Universo, a quedar relegados a un simple y común planeta que orbita una estrella ordinaria en los suburbios de una galaxia -la Vía Láctea- que tampoco tiene nada de especial. Esta situación ha permitido especular con que los acontecimientos que dieron lugar a la vida en la Tierra hayan tenido lugar en miles de millones de sitios más. Al fin y al cabo, si nuestro planeta no tiene nada de especial, no hay motivos para creer que sea el único lugar capaz de haber desarrollado organismos inteligentes. Sin embargo, y a pesar de la tecnología que el hombre ha creado a lo largo de siglos, hemos sido incapaces de encontrar evidencia alguna que pruebe la existencia de otra civilización extraterrestre.

A principios de la década de 1940, en medio de una conversación informal con sus colegas del Proyecto Manhattan -que terminó poniendo a punto las bombas atómicas que se arrojaron sobre las ciudades japonesas- Fermi planteó esta cuestión. Si bien Drake no publicaría su famosa ecuación destinada a proporcionar un valor concreto a la cantidad de planetas habitables que existen hasta 10 o 15 años más tarde, los científicos tenían elementos para suponer que la Tierra no era el único planeta del Universo. Era esperable que alguna de esas civilizaciones, sobre todo las que fuesen miles o millones de años más antiguas que la humanidad, hubiesen desarrollado una tecnología lo suficientemente avanzada como para recorrer la Galaxia o, al menos, intentar enviar alguna clase de mensaje a las demás civilizaciones del vecindario. Sin embargo, y a pesar de algunas historias de OVNIs y abducciones carentes de pruebas, nunca habíamos (ni hemos) encontrado rastros de vida extraterrestre inteligente, como sondas automáticas, naves espaciales alienígenas o transmisiones de radio.

La Paradoja de Fermi puede resumirse de la manera siguiente: “La creencia común de que el Universo posee numerosas civilizaciones avanzadas tecnológicamente, combinada con nuestras observaciones que sugieren todo lo contrario es paradójica, y nuestro conocimiento o nuestras observaciones son defectuosas o incompletas.” No es raro que Fermi, un físico abocado al desarrollo de una bomba nuclear, se plantease este problema. El científico creía que la respuesta a su paradoja había que buscarla en su propio trabajo. Tarde o temprano, razonaba Fermi, toda civilización lo suficientemente avanzada desarrolla con su tecnología el potencial de autoexterminarse, tal y como él mismo creía que estaba haciendo la humanidad al desarrollar armas de semejante calibre. El hecho concreto de no encontrar pruebas relativas a la existencia de otras civilizaciones extraterrestres le hacían pensar en que un trágico final le esperaba a la humanidad.

El campo magnético terrestre se encarga de protegernos del “viento solar”

Para intentar explicar la paradoja algunos echan mano a la hipótesis de la Tierra Rara. Esta teórica sugiere que la vida es tan extraña en el Universo debido a que -contrariamente a lo que creemos- hay una gran escasez de planetas similares al nuestro. La Tierra sería un planeta especial, y por eso es uno de los pocos que alberga vida. Uno de los argumentos esgrimidos para defender esta postura, se relaciona con la posición que la Tierra ocupa en la Galaxia. Los brazos espirales de la galaxias contienen un gran número de novas, cuya radiación es perjudicial para la vida superior. Sin embargo, el sistema solar está en una órbita muy especial dentro de la Vía Láctea: una órbita casi circular, a una distancia en la que se mueve prácticamente a la misma velocidad que las ondas de choque que forman los brazos espirales. La Tierra ha estado en esta ventajosa posición durante cientos de millones de años. Ese es el lapso en el que ha existido vida superior en la Tierra. Continuar leyendo «Vida extraterrestre : La paradoja de Fermi»

Nuevo experimento con el colisionador de Hadrones

Más de un año después de que una explosión de chispas, hollín y el helio frío lo apagaran, el experimento de física más grande y más caro del mundo, conocido como el Gran Colisionador de Hadrones, está listo para comenzar de nuevo. En diciembre, si todo va bien, los protones comenzarán a agolparse en una pista de carreras subterránea fuera de Ginebra en la búsqueda de las fuerzas y las partículas que reinaron durante la primera billonésima de segundo del Big Bang.

Entonces será el momento de probar una de las teorías más extrañas y revolucionarias en la ciencia. Y no se trata de dimensiones extra del espacio-tiempo, de la materia oscura o incluso de agujeros negros que se tragarían a la Tierra. No, se trata de la noción de que el problemático colisionador está siendo saboteado por su propio futuro. Un par de físicos, de otro modo distinguidos, han sugerido que el hipotético bosón de Higgs, que los físicos esperan producir con el colisionador, podría ser tan detestable para la naturaleza que su creación lo llevase hacia atrás en el tiempo y detuviese el acelerador antes de que pudiera ser creado, como un viajero del tiempo que retrocede al pasado para matar a su abuelo. Continuar leyendo «Nuevo experimento con el colisionador de Hadrones»