El hombre lobo; Romasanta.

Manuel Blanco Romasanta. Este nombre todavía causa pavor en Ourense. Un caso que llamó mucho la atención en el siglo XIX ya que fue juzgado y condenado por licantropía, por ser hombre lobo.Al parecer sus fechorías consistían en asaltar a sus víctimas con una desmesurada violencia. Una vez muertas, les sacaba la grasa, el unto, con el que negociaba y vendía a los compradores. Esta actividad de comerciar con grasa humana le hizo ganar el apelativo de “o do unto” y, sobre todo, de “sacamanteigas”. La figura del “sacamantecas”, conocida en toda Galicia, tiene su origen en este personaje real y fue usado como asusta-niños desde el siglo XIX.

Realmente es el primer psicokiller del que se tiene constancia y, al parecer, él realmente se creía un lobo. Fue perseguido por la Guardia Civil, motivo por el cual se exilió a Castilla bajo la identidad de Antonio Gómez.

Fue detenido por la Guardia Civil en Nombela (Toledo), cerca de Escalona, el 2 de julio de 1852. Él negó en todo momento ser Romasanta, pero de todas formas fue llevado a Verín para ser juzgado. En el juzgado de Verín, su actitud cambió notablemente.

Tras la detención, vino el juicio, por el que un sumario de más de 2000 folios detallaba al menos trece muertes, la mayoría mujeres. Este sumario desvela como, bajo la incredulidad de los presentes en el juicio, Romasanta declaraba que era víctima de una maldición que le hacía cometer los asesinatos. El decía entrar en un estado en el que su actividad humana cesaba y se convertía en lobo, estado que le duraba entre dos y ocho días. Así recorría los montes, acechando y merodeando. Además reconocía estar consciente en todo momento pero no poder hacer nada para frenar esa maldición, aunque después del trance se sentía muy arrepentido de los hechos.

La condena por licantropía causó el interés de la reina Isabel II, que pidió el indulto de la muerte por garrote vil. Esto permitió a Romasanta seguir con vida.

Todo lo referente a Romasanta y su juicio se encuentran el Archivo Histórico del Reino de Galicia.

Texto extraído de: Ocultismo y Conspiracion

La Hamaca de Firmat

Los vecinos de la localidad de Fermat en Santa Fe, no pueden creer lo que ven. Aseguran que una plaza es visitada por el espíritu de un chico que murió hace veinte años.

No hay viento, ni siquiera brisa. Y, sin embargo, la hamaca se mueve. A su lado, otras dos hamacas se mantienen firmes en sus lugares. Pero la misteriosa hamaca de la punta se mueve en forma evidente, casi como si alguien se estuviera meciendo en ella. Pero allí no hay nadie. El misterio, que mantiene en vilo a los habitantes de Firmat, sucede desde hace algo más de una semana en una plaza ubicada en uno de los accesos a esa localidad.Yo lo he visto. También mucha otra gente», aseguró Gonzalo Ramos, un periodista de Firmat, en diálogo con Radio 2. «Es una historia que va de boca en boca, pero ya ha tenido connotación nacional», planteó.¿En qué consiste el fenómeno? «Una hamaca que se mueve», resumió Ramos. «No sucede todo el día, es por momentos. Varios medios han ido pero no han logrado imagenes. La gente se agolpa frente a la plaza a la espera de que la hamaca se mueva», planteó.El periodista evocó cómo arrancó la historia. «Hace años, en los ochenta, se construyó en la zona un nuevo barrio llamado La Patria. En esa construcción hubo un accidente donde un niño perdió la vida en los cilindros de cemento gigantes de desagüe. Esa historia es real, es un chico con nombre y apellido», puntualizó.

Dicen que el espíritu de este chico siempre se mantuivo ahí. Dicen que hace unos años ya pasaba lo de la hamaca, pero ahora volvió», relató.

El periodista de Firmat contó que «hay tres hamacas comunes con cadenas y asientos de goma en una plazoleta infantil ubicada en el ingreso a la ciudad. Una se mueve aún cuando hay condiciones climáticas normales y no hay viento. Se mueve mucho e incluso demasiado, como si alguien se estuviera hamacando. Llega a dos o tres metros de recorrido hacia atrás o adelante».

Son tres hamacas continuas pero al lado las otras dos se quedan totalmente quietas. Es de no creer. Es algo paranormal», insistió.

Noticia Extraída de: http://www.rosario3.com

La Bestia de Gévaudan

A mediados del siglo XVIII, una extraña bestia aterrorizó al pueblo de Gévaudan, en Francia. Los testimonios hablan de un lobo de grandes dimensiones que atacó a más de trescientas personas entre mujeres y niños, cien de ellas, víctimas fatales. Esta bestia, considerada en ese entonces como diabólica, fue considerada simplemente como la Bestia de Gévaudan, y hasta ahora, no se sabe a ciencia cierta, si existió verdaderamente o no.

Y es que las escenas con las que se encontraban los aldeanos de Gévaudan, eran terribles, los cuerpos asesinados por esta bestia por lo general se hallaban partidas por la mitad, decapitadas y desentrañadas. ¿Qué animal era capaz de cometer tan crueles asesinatos? ¿Un lobo, un oso, o como se pensaba, un ser fuera de este mundo?

La descripción

Los testimonios hablan de una bestia mucho más grande que un lobo o de cualquier otro animal conocido en la zona, dicen que tenía el lomo rayado con una larga línea negra que iba desde el cuello hasta la cola, su pelaje era rojo, y la cola larga con una especie de mechón felino en la punta. Sus fauces, eran fuertes y punzantes.

Por su captura

Tal fue el temor de este pueblo francés, que el propio rey Luis XV envió a su propia caballería para capturar a la bestia, sin embargo, ésta fracasó en su intento. También se dice que un grupo de cazadores logró capturarlo, e incluso que el cuerpo de la bestia fue llevado hasta donde el rey para ser expuesta luego (aunque sólo su esqueleto) en el Museo de Ciencia Natural en París. No obstante, una vez expuesta ocurrió un incendio en el edificio que terminó por incinerar toda evidencia de la bestia.

Hasta el momento, no se sabe a ciencia cierta qué era esa bestia, y muchos han explicado que se trataría de animales que los pobladores desconocían como leones u otros felinos, traídos por nobles o espectáculos circenses de la zona. Otros aseguran que los asesinatos de la bestia fueron confundidos con asesinatos perpetrados por delincuentes comunes, esto debido a la aparente selección de las víctimas que eran en su mayoría mujeres jóvenes y niños, en muchos casos, las víctimas presentaron signos de ataques sexuales. La presencia del lobo no sería más que una función meramente carroñera y no de ataque.

Sea como fuere, hasta ahora, no se ha logrado determinar la naturaleza de este ser, en este caso, los documentos históricos se confunden con el mito popular y el propio folclore del pueblo, que incluso hoy en día, consideran como cierta la teoría de la presencia de un extraño ser que habitó en sus tierras.