Existieron los Dragones?

El Dragón es un ser mitológico que todos conocemos muy bien y que forma parte del ideario colectivo desde siempre. Realizar una búsqueda por distintas fuentes de internet, bastará para demostrar que nadie sabe exactamente el verdadero origen de éstos increibles reptiles voladores. Aún siendo simplemente un mito, nadie puede explicar porqué dragones de similares características están presentes en la mayoría de las culturas de la humanidad, en tiempos bien discímiles y en geografías separadas por miles de kilómetros.

Luego, y aunque más de uno se enoje con quien escribe éste artículo, si nadie encuentra una explicación racional o convincente sobre el origen ficticio de los dragones, tendré que suponer que existen o que al menos existieron en un determinado momento histórico y un lugar geográfico específico.

El Origen de los Dragones

Historiadores y mitólogos, sostienen que el Dragón tiene su origen en la Mitología China. La Diosa Nü-kua, encargada de la reproducción de todos los seres vivos habría creado primero a los Dragones y posteriormente a los humanos chinos. En éste contexto, es de suponer que finalmente el ideario de Dragón persistiera hasta nuestros días gracias al legado de la cultura oriental y por el simple mecanismo de la reproducción oral, libros, cuentos y cualquier otro medio de transporte del conocimiento.

Por otra parte, de haber existido dragones en algún momento de la historia, los paleontólogos tendrían que haber encontrado restos fósiles que demostraran su existencia. Esto representa un obstáculo, hasta el momento determinante, para probar que los dragones pertenecen al plano de la relidad.

Existieron los Dragones?

Hasta aquí, parecería estar solucionado el asunto. Sin embargo,  cabe destacar que en la actualidad, la paleontología sigue descubriendo nuevos fósiles que desacreditan teorías contundentes y que la biología marina sigue descubriendo año tras año cientos de especies nuevas, no clasificadas por la ciencia y totalmente desconocidas por el hombre.

Es preciso mostrar algunas evidencias de que los dragones, con su forma y sus características representativas, existían en el ideario de de distintas culturas de la historia, en distintos momentos históricos y separadas entre si por miles de kilometros de distancia.

Los Dragones de la cultura Precolombina:

En la Mesoamérica precolombina existe una gran tradición de veneración a la serpiente «cóat», como animal sagrado. Pero ésta serpiente de la que los autores hablan al referirse a las culturas de la américa precolombina, tiene numerosas similitudes con los dragones de occidente, además de que etimológicamente dragón significa serpiente. [Leer más sobre los dragones en nuestro artículo : Todo sobre los Dragones] Un ejemplo de ésto es el Quetzalcóatl de los toltecas.

Quetzalcóatl – Serpiente preciosa. La traducción literal anteriormente usada de «serpiente emplumada» ha ido cambiando conforme a nuevos hallazgos e interpretaciones de las culturas nahuas. El término «quetzalli» en el caso de Quetzalcoatl significa precioso debido al plumaje reluciente del dragón, ya que las plumas eran utilizadas por los pueblos americanos en forma de joyas y las plumas del quetzal eran las más preciosas de todas, de ahí que el término haya pasado de «serpiente emplumada» a «serpiente preciosa» o «hermosa serpiente voladora» que es un término más conceptual y no una mera traducción literal. Así bien, la serpiente preciosa posee un plumaje de brillantes colores en donde predomina el verde turquesa, además de un gran tocado de plumas rodeando su cabeza a manera de melena. Y en una piramide esta representado que en el equinoccio baja una serpiente del cielo. Aparece representado en muchas culturas como ornamento en muchas partes, desde vasijas ornamentadas hasta templos y edificios. La serpiente preciosa es casi exclusivamente identificada con el dios tolteca Quetzalcóatl, el que fue reverenciado por múltiples culturas del Valle de México como los teotihuacanos, los propios toltecas y hasta los tenochcas, como podremos evidenciar en el arte de cualquiera de estos pueblos.

El dragon en Occidente

Los antiguos escandinavos – «Los vikingos», adornaban las proas de sus naves esculpiéndolas en forma de dragón. Usaban esta decoración en la creencia de que así asustarían a los espíritus que vigilaban las costas a las que llegaban.

La imágen de la izquierda es la fotografía de una pieza de madera perteneciente a la proa del barco de Gokstad expuesta en Museo de los Barcos Vikingos, en Oslo, Noruega.

Los cristianos heredaron la idea hebrea del dragón, que aparece en el Apocalipsis, del apóstol Juan, y en otras tradiciones posteriores. En el arte cristiano del Medievo simboliza el pecado y al aparecer bajo los pies de los santos y mártires representa el triunfo de la fe y los reinos cristianos sobre el diablo.

En las leyendas alemanas antiguas protegían tesoros y secretos. En el dragón se ven la serpiente y el ave, como la tierra y el aire, los cuernos representan virilidad y fuerza, tomando forma de cuernos de ciervo, cabra, antílope o toro. De la misma forma la cola es de cocodrilo o dinosaurio, de pez o anguila, y hasta de delfín o culebra, Siempre se resume en la combinación de Fuego y agua. Y algunos lo caracterizan como un rasgo de cada estación, una seca y otra húmeda.

Existen muchas coincidencias entre éstos dragones occidentales y los de América, sin mediar contacto alguno entre ambas civilizaciones. Se pueden leer más similitudes en algunos de éstos sitios:

Un video sobre dragones.

El siguiente video es un documental que habla específicamente de éste tema. Lo encontré aqui : existieron los dragones ?, buscando más información.

Dragones: La leyenda se hace realidad – Parte 1

Para ver todos los videos lee el resto de la entrada: Continuar leyendo «Existieron los Dragones?»

Expedicion en Sumatra: Tras los pasos del legendario Orang Pendek

Exploradores británicos dicen haber visto y seguido durante dos semanas el rastro de un hombre mono legendario que vive en una densa región selvática de la Isla de Sumatra, Indonesia.

Un equipo de cuatro exploradores y su guía, persiguieron durante varios días el resto de un Orang Pendek, una supuesta criatura mitad hombre y mitad simio, de baja estatura y pelaje negro oscuro que se presume, viviría en las áreas salvajes de Sumatra.

Como única prueba obtenida de ésta expedición, consiguieron traer de la isla una muestra de cabello y un trozo de madera mordido de palma rattán, que serán sometidas a rigurosos análisis de ADN para descifrar si realmente pertenecen a éste desconocido ejemplar. También descubrieron una extraña huella que aparentemente pertenece a la criatura.

En la isla, existen relatos y testimonios de avistamientos de un extraño ser recubierto de pelos, de un metro y medio de estatura y de apariencia humana desde la época colonial, y existe la creencia popular de que el legendario Orang Pendek posee una fuerza extraordinaria.

El escurridizo orang Pendek comparte su hábitat con el tigre de Sumatra, pitones y cocodrilos de agua salada.

Richard Freeman, el zoólogo de la expedición y director de zoológicos en el Centro de Zoología Fortean, dijo que cree que la criatura es una especie de simio no identificada por la ciencia: «No estamos hablando de un unicornio o un grifo, estamos hablando de un mono que es desconocido para la ciencia», dijo. Por lo pronto se esperan los resultados del ADN.

Descubren fósil de dinosaurio con cuatro alas y plumas

Científicos chinos han descubierto el fósil, de 130 millones de años de antigüedad, de un dinosaurio con cuatro alas y plumas. Se estima que éste descubrimiento puede desacreditar las teorías actuales sobre la evolución de los reptiles prehistóricos y su transición hacia los animales modernos.

El fósil, hallado en la provincia de Liaoning, al norte de China recibió el nombre de «Anchiomis huxleyi y según los análisis a los que ha sido sometido, se estima que vivió unos diex millones de años antes que el Archaeopteryx, quien hasta el momento era el ave más antigua conocida.

La escasés de fósiles en buen estado, similares al de éste ejemplar, habría sido el impedimento principal para establecer un debate sobre la evolución de los dinosaurios.

En éste nuevo contexto surge, como principal hipótesis, que pudo haber una fase en la que los dinosaurios tuvieran cuatro alas en su transición a aves.