El niño «gato» que puede ver en la oscuridad

Un niño tiene estupefacta a la comunidad médica china: El pequeño, que nació con los ojos azules, tiene la extraña facultad de ver en la oscuridad, como si se tratara de un felino; A ello debe su apodo de «Niño gato». Se trata de Nong Youhui, un pequeño oriundo de la ciudad de Dahua, al sur de China, quien según los médicos padecería de una variación de la enfermedad denominada leucoderma.

La leucoderma, es una enfermedad que afecta la pigmentación de la piel, aunque en éste caso particular, sería de los ojos, haciendo que éstos sean más sensibles a la luz, por su claridad.

El padre del pequeño descubrió que su hijo tenía los ojos de un color azul muy claro, y como ésta tonalidad no es muy común en la comunidad china, realizó una consulta al médico, creyendo que se trataba de una enfermedad. El profesional señaló que no era para alarmarse, y que, con el tiempo, los ojos se volverían negros.

Sin embargo, hasta el momento no solo no ocurrió lo predicho por el médico sino que además, el niño desarrolló la capacidad de ver en la oscuridad con total claridad. Además sus ojos pueden brillar en la noche, tal y como los gatos.

Por fortuna y segun distintos especialistas consultados por la familia Youhui, parece ser que dicha cualidad no representará un problema grave ni traerá consecuencias negativas al crecimiento y desarrollo normal del pequeño Nong.

El fin de los antibióticos y el surgimiento del yodo como una alternativa eficaz

Finalmente, los antibióticos van a terminar siendo vistos como una de las peores cosas que ha implementado la ciencia farmacéutica, porque al final, han terminado por hacernos cada vez más débiles a los cientos de miles de virus que nos atacan todos los días y que cada vez son más fuertes y resistentes a todos los antibióticos que los médicos tienen a su disposición.

Los antibióticos, han cumplido con su papel «anti-biótico» o «anti-vida», dejando un largo rastro de muerte y sufrimiento como consecuencia de su uso.

Enfermedades como el sarampión, la escarlatina, la tuberculosis, la fiebre tifoidea, neumonía, influenza, tos ferina, la difteria y la poliomielitis. Todos ellos estaban en declive desde hace varias décadas antes de la introducción de los antibióticos o las vacunas.

Los antibióticos no matan los hongos. Muchas mujeres, después de tomar antibióticos de forma prolongada, incurren en infecciones vaginales provocadas por hongos (debido a que el equilibrio bacteriano normal se ha perdido). Se cree que más del 40 por ciento de todos los cánceres se producen por causa de infecciones, el tema de los antibióticos y la necesidad de algo más seguro, más eficaz y efectivo para la vida es imprescindible.

El Dr. Marc Lipsitch, doctor de Salud en la Universidad de Harvard, afirma que todavía puede pasar algún tiempo antes de que podamos entrar en la era de los «Post antibióticos», en la que las infecciones comunes puedan tratarse con medicamentos alternativos a éstos.

De hecho, los síntomas de las afecciones respiratorias frecuentes, como la bronquitis crónica o el Asma y la rinitis alérgica ya se están tratando en la actualidad con corticoides en lugar de antibióticos para aliviar los síntomas y restablecer la salud. Si bien el tratamiento es a largo plazo a diferencia de los antibióticos que producen mejoría casi espontánea, el uso de corticoesteroides está dando muy buenos resultados en dichas afecciones.

Los antibióticos matan a las bacterias en el cuerpo, incluyendo aquellas necesarias para nuestro organismo.

Como funcionan los antibióticos

Un antibiótico es una sustancia producida por ciertas bacterias u hongos que mata a otras células o dificulta su crecimiento. En la naturaleza, estas sustancias ayudan a algunos microbios a sobrevivir, mediante mediante la limitación de la multiplicación de los microbios que comparten el mismo entorno. Continuar leyendo «El fin de los antibióticos y el surgimiento del yodo como una alternativa eficaz»

La eterna juventud

Hace un tiempo escribí sobre la restricción calórica y la generación de ciertas proteínas fundamentales en la longevidad humana, pero esta información de ser seguida por más estudios y avances genéticos puede ser un complemento de vital importancia, tal vez fundamental.

Toda célula viva tiene fecha de caducidad. El conocido como límite de Hayflick determina cuantas veces se puede reproducir una célula antes de entrar en senescencia. Una forma de saber que una célula ha empezado a envejecer así, es detectar la presencia de la proteína p16Ink4a.

Un grupo de científicos de la Universidad de Pekín aseguró haber descubierto la fuente de la eterna juventud, pues han descubierto que el gen P16 es el principal responsable del envejecimiento de las células humanas y aseguran haber hallado un método para retrasar la degeneración celular a través de la inhibición de dicho gen, paso clave hacia la prolongación de la vida del ser humano.

Los doctores Tong Tangjun y Zhang Zongyu, jefes del equipo científico responsable del hallazgo, explicaron que el gen P16 controla la vida de las células al ejercer una función de “reloj biológico célula”, además, los expertos han demostrado que es posible prolongar la vida de una célula inhibiendo las funciones del gen, con lo que se retrasa la degeneración celular y, en consecuencia, también la del ser humano.

Este descubrimiento supone un gran avance en la investigación de los mecanismos del envejecimiento y ha abierto un nuevo camino para la comunidad científica a la hora de descifrar el secreto de la degeneración de las células humanas.

El doctor Darren Baker de la Clínica Mayo y su equipo se propusieron estudiar este tema. Modificaron genética-mente un ratón para que su proceso de envejecimiento fuese más rápido de lo normal.

Nuestro pobre ratón envejecía hasta que los doctores activaron otra de sus características especiales: de envejecer la de eliminar todas las células con la proteína p16. Y el ratón dejó de envejecer. Hasta el día que lo sacrificaron, el rátido mantuvo el mismo estado de salud que cuando le inocularon

Por lo tanto existe una vinculación directa entre el envejecimiento celular y ciertas enfermedades degenerativas como las cataratas o diabetes. Y además, es teóricamente posible frenar esas enfermedades eliminando las células senescientes del metabolismo. Un considerable aumento de calidad de vida, cuando menos.

De todas formas, los científicos son humildes con los resultados obtenidos, puesto que no podemos simplemente extrapolar lo que pasa en un ratón de laboratorio drogado y modificado genética-mente a una persona ordinaria. Por otro lado, la proteina p16 tiene su importancia, puesto que es un seguro natural que impide que las células se reproduzcan ilimitadamente.

Ahora bien, sería interesante que algunos vivieran para siempre y otros , por el tendal que dejan, mejor nunca hubieran nacido.

Recopilado por Manlio E. Wydler