Un objeto volador no identificado fue observado por una gran cantidad de personas de la ciudad cordobesa de Río Cuarto, en la noche del pasado lunes 16 de enero de 2008. El avistaje fue confirmado por la Fuerza Aérea Argentina.
A esa hora no había vuelos programados tanto de aviones civiles como militares, confirmó el vocero de prensa de la Fuerza Aérea Argentina. Y precisó que el supuesto ovni avistado «no correspondía a ninguna aeronave de tipo convencional». El objeto volador se pudo apreciar a las 22.30 en una región bastante abierta de la ciudad mientras realizaba movimientos elípticos de «este a oeste», a gran velocidad. Un operador de la Fuerza Aérea que estaba en la torre de control del aeropuerto de Río Cuarto observó la nave en el cielo y trató de tomar contacto radial con ella, pero nunca recibió respuesta.
El vocero confirmó: «ha habido un avistaje por parte de uno de los operadores de la torre de control, justamente de un objeto que no correspondía a una aeronave ni comercial, ni militar, ni a ninguna convencional, ni tampoco correspondía a uno de los satélites que se suelen ver».
Varios riocuartenses que estaban disfrutando de la noche también se percataron de la presencia del ovni, por lo que alertaron a las radios locales. Lo que relataban los ocasionales testigos de la presencia del aparato señalaban que el mismo era «un objeto grande, con luz amarillenta, más que los satélites» que suelen verse en la zona.
Aunque las autoridades de la Fuerza Aérea confirmaron que el objeto que se vio en el cielo riocuartense no pudo ser identificado, evitaron pronunciarse sobre si podría tratarse de una nave de origen extraterrestre.
En tanto que en Estados Unidos, varias personas de un poblado de Texas afirman haber avistado objetos extraños sobrevolando el cielo. «Todos temen que sea el fin de los tiempos», afirmó un lugareño.
Entre las decenas que aseveran haber visto un objeto volador no identificado se encuentran empresarios, un piloto y un policía del condado. Según su descripción, se trataría de un aparato silencioso con luces brillantes que vuela a gran velocidad y muy baja altura, algunas veces seguido por aviones de combate, informó «El Nuevo Herald» en su versión digital. Steve Allen, dueño de una empresa de transporte y piloto, también dice haber visto el aparato. Según sus palabras, tenía unos 1.600 metros de largo y 800 de ancho. «Era positivamente, con seguridad, algo que no viene de éste mundo», afirmó.