Se trata de un monograma generado por la conjunción de las letras su astí (en idioma sánscrito su: ‘muy’, astíka: ‘auspicioso’) en caracteres ashoka (anteriores a las letras devanágari, que son las que desde hace varios siglos se utilizan en la escritura del sánscrito). Según algunos autores esto demuestra que el símbolo no fue creado en esta era, sino aproximadamente en el siglo V AC. Aunque los vaisnavas (vishnuitas) dicen que la esvástica está «eternamente dibujada en una de las cuatro manos de Dios«. Otra probabilidad de su significado se trata que cada «cabeza» o «brazo» pueda representar a uno de los cuatros elementos, uniéndolos así en plenitud.
Este símbolo, que ha venido apareciendo repetidamente en la iconografía, el arte y el diseño producidos a lo largo de toda la historia de la humanidad, ha representado conceptos muy diversos. Entre estos se encuentran la suerte, el Brahman, el concepto hindú de samsara (reencarnación) o a S?rya (dios del Sol), por citar solamente los más representativos. En principio la esvástica fue usada como símbolo entre los hindúes. Se menciona por primera vez en los Vedas (las escrituras sagradas del hinduismo), pero su uso se traslada a otras religiones de la India, como el budismo y el jainismo.
Una creencia occidental moderna, probablemente apócrifa, sostiene que sólo la esvástica con brazos doblados hacia la derecha es una marca de buena suerte, mientras que la esvástica de brazos doblados hacia la izquierda representa un augurio nefasto. Incluso algunos occidentales la han nombrado arbitrariamente sauwastika, lo cual desde el punto de vista de la etimología sánscrita es un adefesio. No existen pruebas de esta distinción en la historia del hinduismo de la que proviene el símbolo y, no obstante la versión más corriente es la esvástica dextrógira, los hindúes de la India y Nepal siguen usando el símbolo en sus dos variantes por mor de. Los budistas casi siempre emplean la forma levógira. A principios del siglo XX el Nazismo adoptó la cruz esvástica como emblema y —a raíz de la Segunda Guerra Mundial— en Occidente se identifica mayoritariamente como un símbolo exclusivamente del Tercer Reich, desconociéndose prácticamente su uso pre-nazi. [Fuente: Wikipedia]