Increible : Vampiros Reales de carne y hueso

Hay historias reales que parecen de película. Una de ellas es la de Julia Kepls, una mujer de 45 años que vive en la ciudad de Wilkes Barre, en Pensilvania, y que tiene una particularidad: es adicta a la sangre humana.

Según la historia que ella misma contó a los medios locales, se dio cuenta de que tenía este gusto inusual cuando dio su primer beso, a los 15 años, y accidentalmente mordió los labios de su novio. Ese día probó por primera vez el sabor de la sangre humana e inmediatamente comenzó a tener una fuerte atracción hacia ella.

“Una especie de instinto extraño me forzó a hacer esto. Cuando mordí la piel, inmediatamente noté este sabor seductor”, aseguró Julia. Y a pesar de que ese chico nunca más la llamó, a partir de ese momento NECESITA BEBER SANGRE HUMANA PARA SENTIRSE BIEN. Si no lo hace, se siente infeliz y que su belleza desaparece.

Pero no hay que tener miedo. Kepls, esposa y madre de dos hijos, de 11 y 24 años, contacta a personas que estén dispuestas a donar sangre. De vez en cuando, de todas formas, la adquiere en locales clandestinos “especializados en el vampirismo”.

Sus hijos y su marido, Donald Lazarowcs, están al tanto de que lo rojo que su madre toma no es vino. Pero no tienen nada en contra de sus hábitos. Dicen que igual sigue siendo una buena madre y una buena esposa.

Visto en : Creer o Reventar

Descubren agujeros negros en el Océano Atlántico

Un estudio descubre ocho equivalentes matemáticos en la Tierra a los agujeros negros del espacio. Al igual que en los fenómenos cósmicos, en los terrestres nada de lo que entra sale. El hallazgo ayudará a comprender mejor el movimiento de los materiales en los océanos.

Expertos del Instituto Federal Suizo de Tecnología y la Universidad de Miami, en Estados Unidos, revelaron que los vórtices del Atlántico Sur actúan de manera muy semejante a los agujeros negros del espacio.

Según informa Russia Today, el equipo de científicos descubrió que el borde de estos vórtices está representado normalmente por un ancho cinturón de una sustancia brillante, que se asemeja a la esfera de fotones que rodea a los agujeros negros sin entrar en los mismos.

Los especialistas demostraron científicamente esta semejanza al describir el comportamiento de los vórtices en los fluidos turbulentos utilizando los mismos principios matemáticos que describen el fenómeno de los agujeros negros, regiones del espacio tiempo en las que la gravedad es suficientemente fuerte para evitar que ninguna sustancia se escape, incluida la luz.

De acuerdo con el portal Technology Review, el estudió evaluó las corrientes en el suroeste del océano Índico y el sur del Atlántico, donde existe un fenómeno conocido como «la fuga de las Agujas», corriente que se vuelve sobre sí misma, creando de vez en cuando remolinos en la zona meridional.

En su investigación, el equipo de expertos empleó imágenes de satélite del sur del océano Atlántico captadas entre noviembre de 2006 y febrero de 2007 para localizar posibles análogos de agujeros negros.
Como resultado, encontraron durante este período un total de ocho fenómenos con posibilidad de ser denominados agujeros terrestres.

Este análisis podría tener implicaciones importantes para entender cómo las corrientes oceánicas transportan material, pues dado que todo lo que entra en estos agujeros negros ya no puede salir, deben poder atrapar cualquier basura, aceite o incluso la propia agua, moviéndola de manera coherente a grandes distancias.

La investigación también plantea la posibilidad de que se produzcan análogos de agujeros negros en otras condiciones naturales, como en los huracanes, e incluso en otros objetos espaciales. Por lo tanto, según sugieren los científicos, la Gran Mancha Roja de Júpiter, tormenta gigante en la atmósfera del planeta, podría ser el más famoso agujero negro del sistema solar.

Una chancha parió una extraña criatura

La hembra tuvo doce crías y entre ellas a un cerdo con una extraña trompa y ojos deformados.

El parto generó conmoción entre los pobladores de Tafí Viejo, en la provincia de Tucumán. La familia dueña de la chancha conformada por Juan Francisco Vázquez y su esposa, Ana Ester López, viven en la calle Perú Sud 2300 y en su casa tienen animales de granja, entre ellos, gallinas y cerdos.

Según el diario La Gaceta de Tucumán, la familia expresó: «Este martes la chancha tuvo 12 crías, pero la cuarta nació deformada. La madre la mordió hasta matarla. Nos impresionamos todos. No sabemos si fue porque la desconoció o porque su instinto animal le dice que debe separar a la cría que no sobrevivirá para poder cuidar a las sanas».