El fantasma que vive en el cuartel de bomberos de Pilar

Las sirenas suenan solas. Se cambian los canales del televisor sin que nadie agarre el control remoto. La historia no es nueva. El terror se apodera del cuartel de bomberos de Pilar desde hace ya varios años. Pero una foto confirmó lo que nadie se animaba a decir. El fantasma de una niña habita el sector en el que se guardan los autobomba.

«Se me apareció una noche en la guardia, hace unos diez años, alrededor de las 2 de la mañana. Estaba más o menos en el mismo sector que se ve en la foto, hasta en el mismo horario, pero del lado de adentro», contó uno de los bomberos al diario local.

En el lugar de la foto, explicaron los efectivos, se trasladaban los cuerpos de víctimas de accidentes de tránsito en los años 70′. Después de aquel episodio, los bomberos no ingresan solos al recinto donde se encuentran los vehículos.

«Una noche me tiraron con un zapato. Pensé que había sido un compañero que estaba durmiendo, pero sus zapatos estaban lejos», contó otro bombero. Ellos sostienen que la aparición del fantasma es la confirmación y el motivo de los extraños sucesos que ocurren en el cuartel.

Ahora, reclaman la asistencia de algun especialista. «Algún medium nos podría ayudar a saber por qué aparece la nena», dicen los bomberos.

Visto en Creer o Reventar

Bolas de fuego en el cielo de Irlanda

Un testigo registró por lo menos tres minutos increíbles con TRES OBJETOS VOLADORES NO IDENTIFICADOS que se mueven en el cielo de Cork, Irlanda.

El video fue subido a Youtube, hace poco, pero indica que el suceso data de diciembre de 2012. “Pido disculpas por la calidad, fue filmado con un teléfono celular. Irónicamente en casa tenía una cámara que podría haber grabado en alta calidad, pero tuve miedo de que las múltiples bolas de luz que llegaron de la nada, que se movían lentamente en el cielo, desaparecieran. Así que usé el teléfono para grabar todo lo que pude”, explica y se justifica el testigo.

El video fue sopesado por expertos. El autor Whitley Strieber y su esposa, Anne Strieber, postearon un artículo con opiniones de profesionales. “Dos de nuestros expertos no descartan la posibilidad de que las luces tengan procedencia desconocida. Un tercero está convencido que se trata de un engaño: un juego con el obturador de la cámara”, dice el artículo.

El monstruo alado de Van Meter

En 1903 cientos de ciudadanos de Van Meter dijeron haber visto a un monstruo gigante alado. Más de un siglo después, el misterio sigue sin resolverse.

La historia comienza durante una noche de otoño de 1903 cuando varios hombres respetados de Van Meter reportaron una criatura medio humana, medio animal con enormes alas de murciélago volando a baja altura por el pueblo. Este misterioso animal habría dejado el aire impregnado de un poderoso hedor y asustó a numerosos habitantes moviéndose a velocidades nunca antes vistas. De su cabeza con cuernos destellaba una luz cegadora.

Los lugareños solo atinaron a dispararle con sus armas, pero los disparos no parecían lastimar o herir a la criatura. La noche siguiente al primer avistamiento el médico del pueblo y la cajera del banco vieron por separado a la criatura. La joven incluso, consiguió obtener un molde de yeso de la huella del supuesto pterodáctilo de tres enormes garras.

Esa misma noche, otro vecino se despertó asustado escuchando un extraño sonido que provenía de afuera, y al asomarse por la ventana vio a la criatura posada en un poste de teléfono, de inmediato tomó su rifle y efectuó infructuosos disparos contra el objetivo. Los disparos desperataron a Sidney Gregg, que había estado durmiendo en su tienda cercana. Gregg dijo que el monstruo saltó como un canguro. Incluso el maestro de la preparatoria local vió el suceso y consideró que se trataba de una especie de monstruo antediluviano.

Los ciudadanos se reunieron en una multitud armada para dar cacería al ser demoníaco. LA última noche que apareció, lo hizo en la mina de carbón abandonada, cerca de una antigua fábrica de ladrillos. Los disparos no fueron suficientes para dar fin con el monstruo que en muy pocos minutos desapareció sin dejar rastros, dejando en el aire su olor catacterístico. Desde aquella noche, la criatura voladora no volvió a aparecer.

El diario «Des Moines Daily News» publicó la historia el 3 de octubre de 1903. Desde ese entonces, la historia se ha transmitido como si se tratara de una leyenda urbana entre la gente, aunque la historia pareciera ser verdadera, nunca más se investigó sobre éste asunto y hasta nuestros días nada se sabe del misterioso monstruo alado de Van Meter.