El libro indescifrable : El manuscrito Voynich

La Biblioteca de la Universidad de Yale, especializada en libros y manuscritos raros, no pasa un día sin que alguien pregunte por el manuscrito de Voynich. Lo que hace tan interensante el manuscrito Voynich es que nadie ha podido leerlo completo, el texto esta escrito en una clave que no ha logrado descifrar ningún criptógrafo ni lingüista del mundo.

El manuscrito mide 14 X 21.5 cm y sus 200 páginas de pergamino están escritas con una caligrafía extraordinariamente fluida si se considera que su autor usó un alfabeto completamente desconocido. Las ilustraciones son igualmente extrañas y paracen representar plantas, mujeres y configuraciones astronómicas. Como no resulta fácil interpretar el texto y las figuras, el libro ha sido calificado como el manuscrito más enigmático del mundo.

En 1912, Wilfrid M. Voynich, un neoyorquino comerciante de libros, anunció que había descubierto ese curioso volumen en la biblioteca del colegio Mondragone, una fundación jesuita en Frascati, Italia.

No hubo en realidad ningún progreso durante casi 60 años, hasta que Robert S. Brumbaugh, de la Universidad de Yale, abordó el problema en la década de 1970. El profesor Brumbaugh advirtió que algunos de los símbolos del manuscrito de Voynich le recordaban un diagrama que había visto en otro documento.

Un examen cuidadoso de algunos márgenes del manuscrito de Voynich reveló calculos grabateados que sugerían que podría haberse usado un número similar en clave. En un margen, Brumbaugh descubrió un diagrama con 26 símbolos, que es el número de letras del alfabeto inglés (Brumbaugh escribió esta guía).

A pesar de lo anterior, el misterio del manuscrito de Voynich sigue sin resolverse. Brumbaugh sugiere que pueden ser las expresiones incoherentes de un alquimista, de alguien que buscaba convertir los metales básicos en oro por medio de una sustancia o elixir secreto.

El documento «VOYNICH»

John Dee dedicó gran parte de su vida, a recorrer el mundo y coleccionar extraños escritos, que por lo general, eran de papiro muy antiguo. Nunca se supo de dónde los sacaba o quién se los conseguía. Durante el reinado de Enrique VIII, el Duque de Northcumberland, se dedica a quitar de circulación todo escrito cuyo contenido fuese poco claro o encarase el tema de la brujería. Para ello, requisó todos los monasterios del reino, que eran los lugares por excelencia donde se guardaban por siglos, semejantes obras.

El Duque era amigo de Mr Dee. En una oportunidad, realizando requisas encontró, en una pequeña abadía del condado de Essex, un manuscrito cuyas páginas semejaban papiro. Estaba escrito en forma cifrada y había sido copiado del original (según rezaba el prólogo) por Róger Bacon, quien fue considerado el gran mago de su siglo.

El prólogo decía lo siguiente: «Ésta es copia fiel del original que se encuentra guardado bajo las montañas que corren sobre la costa oeste de un lejano lugar, situado en el extremo sur del planeta». Teniendo en cuenta que el «copista» del manuscrito, el señor Róger Bacon, había nacido en el año 1214 y dejado de existir en 1294, queda bien claro que aún no se había descubierto América y sin embargo, de acuerdo con la mención del prólogo, ese «lejano lugar» que tiene una cadena montañosa que corre sobre su límite oeste (la cordillera de los Andes), sería un país del extremo sur de América.

Como se dijo anteriormente, el Duque de Northcumberland y John Dee, eran amigos. Cuando el primero encontró en Essex el manuscrito de Róger Bacon, luego de leer su prólogo y ver que las páginas interiores estaban escritas de forma cifrada, recordó que Mr. Dee era afecto a coleccionar papeles extraños, y se lo regaló. John Dee trató de descifrarlo. No pudo, sólo logró determinar que la primera parte del escrito, decía que ese libro contenía «los secretos de los mundos olvidados y subyacentes». En 1586, John Dee regala al Emperador Rodolfo II, el famoso libro papiro.

A partir de 1666, el misterioso documento pasa de mano en mano y recorre el mundo gratuitamente. Nadie logra descifrarlo, hasta que en 1962, llega a Estados Unidos. Se encuentra a la venta, aún hoy en nuestros días. Su valor, sobrepasa el millón de dólares.

El señor Kraus, alemán radicado en Nueva York, es quien lo tiene en espera de un posible comprador. La historia del manuscrito, denominado en la actualidad como «Documento de Voynich», es la siguiente: «Luego de la muerte de John Dee en 1608, nadie se ocupa del «Documento de Voynich» hasta el año 1666, en que el doctor Marcus Marci, rector de la Universidad de Praga, envía el escrito al jesuita Kircher, experto en criptografía y codificación, para su interpretación. Fue inútil, no logró desentrañar el misterio».

Se pierden los rastros del documento hasta 1914, en que se vuelve a encontrar en el pueblo de Frascatti (Italia); era propiedad de unos jesuitas que allí tenían su convento, lugar donde se guardaba el documento. El famoso e indescifrable escrito, va a tomar el nombre que actualmente lleva: «Voynich», a causa de que el editorialista W. Voynich es quien compra a los jesuitas el extraño documento en ese año de 1914.

Se lo lleva a los Estados Unidos. En 1916, un caballero de los tantos que habían sido consultados con la finalidad de descifrar el documento, el señor Adolph Cyrus Roidingercht, dice poder hacerlo, pues uno de sus antepasados, fue amigo de Róger Bacon, quien regaló a su pariente una guía de traducción de un código secreto que utilizaban los habitantes protohistóricos del extremo sur del planeta y que actualmente, obraba en su poder por derecho de legado.

Al poner el señor Roidingercht manos a la obra, descubre que el libro hablaba de una civilización desaparecida, cuyos integrantes, eran seres de no más de un metro de altura y que dominaban la fuerza de gravedad, que poseían máquinas que les permitía horadar la roca, construyendo grandes ciudades subterráneas y que se intercomunicaban con el resto del planeta por debajo de la Tierra. Inclusive, nombra una máquina llamada «Nilotrona» (¿alguna relación entre el río Nilo, los egipcios y sus avanzados conocimientos en psicotrónica?).

Asimismo, muestra un mapa celeste de un sector desconocido del firmamento, donde aparentemente, figuran dos lunas y dos soles. Cada página del documento, está pintada de un color diferente, todos ellos muy vivos y brillantes, semejantes a los del aura humana. Sobre una de esas páginas, hay una especie de diccionario de botánica con plantas dibujadas que son muy singulares, algunas de ellas, parecen tener ojos, son especies desconocidas para nuestro planeta. Hasta aquí, lo que pudo descifrar Roidingercht del «Documento Voynich», pues el 22 de Enero de 1917, desapareció misteriosamente, sin dejar rastros.

Daba la impresión, que se vio obligado a huir precipitadamente, pues, su pipa estaba aún húmeda sobre el cenicero. Sin embargo, el indescifrable libro había quedado abierto en una de las partes donde figuraban los planos de una extraña máquina semejante a la de las turbinas de los modernos «jets», a un costado de la hoja, un modelo a escala de lo que sería en la actualidad, el súper moderno avión Concorde…

Posteriormente, en 1919, el decano de la Universidad de Pennsylvania, William Newbold, se aboca a la tarea de Seguir descifrando el «Voynich». En 1921, ante una conferencia de prensa, dice haber descifrado cosas interesantísimas en el documento y se dispone a dar una serie de charlas sobre el particular. Pero extrañamente, no puede llevar a cabo esta tarea. Se contradice y cada vez, es más difícil llegar a él.

Newbold comienza a recibir amenazas, algunas de ellas, escalofriantes. Fallece en 1926 y al igual que Bacon, se lleva el secreto a la tumba. Sin embargo, aún hasta nuestros días, es ardua la tarea de estos «conspiradores contra el conocimiento oculto». Somos muchos los que poseemos fotografías de las páginas del extraño documento. Es preciso que el mundo conozca el verdadero contenido del «Voynich».

Dice así: «Posee el ser humano, una energía muy especial que se gesta en la parte superior del cerebro y su medida, es la del «voluciclo». Esta es la tercera organización cerebral independiente, cuya sede se encuentra en la columna vertebral.

Cada zona intervértebra, tiene relación particular con el conocimiento asequible al ser humano y actúa a modo de archivo o depósito. Las zonas intervértebras, están relacionadas íntimamente, con el «conjunto sonomedular» que tiene, al igual que el volucio, su centro de actividad en la parte superior de la cabeza». Éste es un llamado de atención al mundo. Al mundo porque el «Documento Voynich», habla de una «tercera organización cerebral», que es aquella mediante la cual, civilizaciones desaparecidas lograron sus impresionantes conocimientos, dado que sabían poner en funcionamiento ese «sono medular» cuya utilización, significa descubrir nuestra identidad divina.

Cantidad de copias del «Documento Voynich», circulan alrededor del planeta. Sí, seguimos descifrando el famoso y no menos temible «Documento».

El misterio de las Verduras Gigantes

El Valle de Santiago, localizado en el centro de la república mexicana, a pocas horas del Distrito Federal de México, ocupa una superficie de siete kilómetros cuadrados en donde se alzan siete volcanes extintos. Conocido como “El País de las Siete Luminarias” en éste sitio y desde hace ya varias décadas sucede un hecho increible que no ha podido ser explicado rigurosamente hasta nuestros días.

El enigma del Valle de Santiago

A mediados de los años 70, un campesino llamado José Carmen García Martínez cosechó en su granja verduras de dimensiones inusuales; Acelgas del tamaño de una persona, de una longitud de más de 1.80, repollos de más de 40 kilogramos, cebollas tan grandes como la cabeza de un niño, rábanos de 20 kilos, coliflores que debían ser cargados por al menos cuatro personas y lechugas gigantescas, para mencionar solo algunas.

Pero José no era el único granjero cuyas cosechas sobrepasaban los estándares normales, sino que muchos de los agricultores de la zona producían verduras de tamaños poco habituales. La noticia se exparció rápidamente y al cabo de muy poco tiempo, el Valle de Santiago se vió invadido por una legión de expertos, investigadores y curiosos que llegaron en busca de la receta mágica, de lo que prometía ser el inicio de una “Revolución Agrícola”

La fórmula de los Extraterrestres

Los periodistas visitaban con frecuencia el valle en busca de relatos y noticias mientras que los ufólogos habían viajado en numerosas oportunidades para detectar emanaciones de energía o posibles vestigios de actividad extraterrestre. En éste contexto, un vecino de José Carmen García, de apellido Arredondo, lo aconsejó para que dijera que la “fórmula secreta” provenía de las enseñanzas de seres extraterrestres que habían visitado el lugar un tiempo atrás.

En realidad Oscar Arredondo, era fotógrafo aficionado y un confeso seguidor del fenómeno OVNI y había dedicado gran parte de su tiempo a leer e investigar al respecto, y probablemente encontró en las verduras de tamaños gigantes, la oportunidad de dar crédito a sus creencias y orientar las miradas hacia él mismo, además de favorecer de alguna manera a la región en materia económica.

Chac: el monstruo del lago La Alberca

Cuando Arredondo vio frustradas sus intenciones de promocionar la supuesta “Fórmula Extraterrestre” que producía verduras y Hortalizas de tamaño descomunal, para ganar algún rédito económico y credibilidad, ideó una nueva hipótesis en la que hablaba de la existencia de un monstruo, parecido al del lago Ness, que vivía en el cráter del lago La Alberca, próximo al lugar de las increibles cosechas.

Según Arredondo La Alberca no tiene fondo y está habitada por un poderoso animal de seis metros de longitud y cabeza similar a la de un becerro. Algo como un plesiosaurio. El fotógrafo afirmó que durante siglos las leyendas sobre el monstruo han pasado de padres a hijos. Aunque ninguno de los ancianos de la localidad cocone ninguna leyenda popular al respecto. Además las investigaciones realizadas en el lago se encargaron de dementir todos los dichos del fotógrafo.

Los espíritus Mayas y Aztecas

Después de haberse enemistado con Arredondo, José Carmen sostuvo en una entrevista ampliamente difundida, que la receta mágica que el poseía para poder producir hortalizas gigantes se la habían legado los espíritus de las antiguas civilizaciones Maya y Azteca. Los cuales se les han aparecido en numerosas oportunidades desde que tenía 16 años.

Verduras Gigantes en otras partes del Mundo

Distribuidas a lo largo y ancho del planeta, parecen existir zonas en donde ocurren sucesos similares. En Jerusalén, por ejemplo, se pueden cultivar limones de hasta 8 Kg. En Estados Unidos se obtienen coliflores de 38 kilos, y en Inglaterra se llevan a cabo concursos de hortalizas gigantes. En el poblado de Spalding, en Lincolnshire, se han logrado calabazas de 209 kilogramos, rábanos de 5.5 kilos, coles de 53 kilos y remolachas de 18 kilos. En Yorkshire se otorgan premios de hasta mil libras esterlinas en estos concursos. Los ejemplares que se han llevado el dinero han sido unas cebollas de siete kilos y calabazas de 187 kilogramos.

Cultivos Espaciales…

Varias empresas chinas han empezado a cultivar hortalizas como sandías y tomates, cuyas semillas, tras pasar una temporada en el espacio, han sido modificadas por la radiación cósmica, lo que agranda su tamaño y su rendimiento.

La compañía Pujiang Zhengyi Horticulture, situada en las afueras de Shangai, cosechará en unas 670 hectáreas cerca de 50 toneladas de semillas que viajaron en alguna de las misiones espaciales chinas, o generaciones derivadas de ellas.

Shi Zhenggang, subdirector general de la empresa, que plantó en febrero 25 especies vegetales, incluidos tomates, sandías y maíz, cuyas semillas estuvieron a bordo de un satélite recuperado en 2006, afirma que estos productos suelen ser un 25% más grandes que los obtenidos de semillas convencionales.

Feng Zhiyong, miembro de la Academia de Ciencias Agrícolas, asegura que estos cultivos no suponen ningún riesgo para la salud porque los cambios que registran las semillas en el espacio ocurren de manera espontánea cuando entran en contacto con la radiación cósmica.

Descubren una base extraterrestre en Siberia

Existen numerosas historias de misterio en torno a Yakutia. Una enorme región de Siberia, cuya extensión abarca unos tres millones de kilómetros cuadrados. El territorio posee una población de apenas un  millón de personas, por lo que puede considerarse el lugar más desolado del mundo.

Rescientemente, Ufólogos y científicos de todo el mundo han centrado su mirada en éste recóndito lugar, ya que se ha descubierto, en las riberas del río Vilyuy, una serie de cúpulas y bases subterráneas.

Los investigadores creen que éstas instalaciones secretas han sido utilizadas por varios siglos por visitantes de otros planetas. Estas supuestas bases extraterrestres son de gran tamaño e incluso cuentan con muchas habitaciones en las cúpulas.

En las inmediaciones se han descubierto círculos subacuáticos y se especula que los mismos servirían de referencia para ayudar a localizar a los extraterrestres sus bases.

En la actualidad se ha formado una expedición de 15 investigadores y científicos que van a entrar a una de estas cúpulas para finalmente descubrir sus secretos.

El líder de esta expedición científica Nikolai Subbotin, un investigador del fenómeno OVNI. Señaló que “se comentaba que se encuentra escrito en los antiguos pergaminos tibetanos que en tiempos pasados estas cúpulas eran parte de un sistema de defensa de una colonia de ETs. Esto suena muy increíble e incluso fantástico, sin embargo, después de haber leído los pergaminos, puedo decir que realmente no contienen dicha información.”

Realmente no sabemos si estas cúpulas fueron creadas por los extraterrestres o fueron construidas por una antigua civilización tecnológicamente avanzada, humana, que desapareció o fue destruida en algún momento en el tiempo por razones que desconocemos.