La Clarividencia es una forma de conocimiento paranormal o facultad para conocer con antelación los sucesos futuros ya sean éstos muy próximos o un poco más alejados. Es una especie de percepción extrasensorial a través de la cual las personas que la practican sería capaces de recibir información por un medio no corporal (inexplicable para la ciencia moderna). Entre los que creen que ésta habilidad existe, hay quienes aseguran poseer el don de la clarividencia y otros, que es posible desarrollar ésta habilidad con un entrenamiento específico.
Historia de las cartas Zener
Durante los años 20, los parapsicólogos J. B. Rhine y Karl Zener inventaron un método para medir las capacidades adivinatorias de los sujetos sometidos a estudio. Para ello utilizaban una baraja elaborada por ellos conocida como las Cartas Zener. Su método también servía a modo de «brain training» (entrenamiento cerebral) de la época y se supone que a base de repetir el ejercicio se mejoraban los resultados.
La baraja constaba de veinticinco cartas con cinco palos: círculo, cruz, cuadrado, estrella y ondas (u olas). El experimento debía llevarse a cabo por parejas. Uno de ellos mezcla las cartas y coge la primera carta que sale; el otro sujeto, sin ver el dibujo de la carta, debía averiguar de qué palo era. Esto debía repetirse un gran número de veces para obtener resultados fiables. Las probabilidades de acertar eran de un 20%. Los valores por encima y por debajo de esta cifra eran considerados excepcionales y los sujetos que presentaban tales porcentajes eran sometidos a más estudios.
Se supone que repitiendo el ejercicio muchas veces, en días y a horas distintas, podías mejorar tus habilidades de clarividencia. Aunque las reglas de la probabilidad indican que a un mayor número de repeticiones la probabilidad de acierto se acerca cada vez más al 20%. (Por la ley de los grandes números)
Rhine y Zener pronto constataron que había individuos con niveles de acierto muy superiores al 20%. Poco después se dieron cuenta de que el papel era muy fino y se veía el dibujo por detrás. Pero se supone que sí que hay gente que es capaz de adivinar el palo de la carta, convirtiendo así a las Cartas Zener en un método simple para comprobar tales habilidades.