Asusta2

A varios meses del caso que conmocionó a la localidad de Firmat, vuelve a desatarse el debate en torno al caso de las famosas hamacas que se mueven solas en Santa Fe. Aunque ya hemos escrito sobre el supuesto origen de éste fenómeno paranormal en otro artículo de éste mismo sitio: (Las Hamacas de Firmat), daremos continuidad a la noticia debido a los trascendidos ocurridos en los últimos días.

Las hamacas se encuentran ubicadas en la plaza Manuel Belgrano del barrio La Patria, sobre la ruta 93, y su movimiento es un misterio sin develar que incluso alcanzó repercusión internacional.

El portal del diario La Capital informó que hace pocos días una empresa privada envió personal propio para desmalezar la plaza, ya que los vecinos se quejaban porque la Municipalidad no lo hacía.

Pese a su estado de abandono, la plaza convoca a decenas de curiosos desde que trascendió el curioso fenómeno de las hamacas que parecían adquirir movilidad propia.

Luego de que culminaran con las tareas de limpieza, las tres hamacas comenzaron a moverse.

«Es cómo que las tres hamacas agradecían ese hecho, pedido hasta el hartazgo por los vecinos», dijo una persona que prefirió el anonimato citada por La Capital.

El misterioso caso no deja de sorprender y el espectáculo que meses atrás cautivó la atracción periodística de medios nacionales e internacionales y de visitantes de diversas partes del mundo, vuelve a repetirse, señaló la nota.

El fenómeno de las hamacas de Firmat convocó a numerosos estudiosos en su momento, la punto que hacia septiembre del año pasado un grupo de científicos determinó que no era posible hallar una raíz física comprobable ni una explicación racional al movimiento de las hamacas.

Incluso, días más tarde, otro grupo de personas reunidas en Firmat para analizar al hecho anunció que ya estaba resuelto el misterio, pero sólo se limitaron a afirmar que era producto del accionar de dos o tres personas dedicadas a la magia.

Lo cierto es que los análisis más serios que se realizaron del escenario indicaron que no hay ningún elemento básico proveniente del electromagnetismo, corriente galvánica, fuerzas eólicas o corrientes isotérmicas, que ocasionen los movimientos de las hamacas en cuestión.