El Idiacanthus antrostomus es también conocido como el pez dragón. Los machos llegan a medir entre 5 y 7 cm, mientras que las hembras son aproximadamente cinco veces más largas. Viven a más de 2500 metros de profundidad y pertenecen al conjunto de peces denomidados «peces abisales».
No se conoce con exactitud cuantas especies de abisales existen, sin embargo, los que se han descubierto, generalmente poseen rasgos monstruosos. Algunos de ellos tienen órganos bioluminiscentes.
Una recopilación de algunos de los animales más exóticos de la naturaleza; Empezando por el uacarí calvo – (Cacajao calvus), un primate de la familia Pitheciidae que habita en las copas de los árboles de las áreas pantanosas de la selva Amazónica en Brasil.
El Felino más sorprendente.
No estamos hablando de un trigre de bengala, ni de un exótico león africano. Nos referimos a un pequeño felino milenario; El sphynx ó Gato Esfinge (Felis Silvestris Catus). Su aspecto deriva de una mutación genética natural cuyo resultado fue la ausencia total de pelaje. Aunque de aspecto frío, el Gato Esfinge tiene un carácter muy sociable. Fue descubierto por primera vez en Canadá en el año 1966.
El cerdo-ciervo de Indonesia.
El Babirusa (Babyrousa babyrussa), es un extraño cerdo autóctono de las islas Célebes de Indonesia. Su nombre deriva del malayobåbí rûsa, que significa «puerco ciervo«. Recibe éste nombre debido a la rereza de sus colmillos (curvos hacia arriba), que en algunos casos llegan a tocar, con el extremo, la frente del animal.
Freakies del fondo del mar.
El Idiacanthus antrostomus es también conocido como el pez dragón. Los machos llegan a medir entre 5 y 7 cm, mientras que las hembras son aproximadamente cinco veces más largas. Viven a más de 2500 metros de profundidad y pertenecen al conjunto de peces denomidados «peces abisales«. No se conoce con exactitud cuantas especies de abisales existen, sin embargo, los que se han descubierto, generalmente poseen rasgos monstruosos. Algunos de ellos tienen órganos bioluminiscentes.
Aye-Aye: El simio exótico de Madagascar.
El Aye-Aye es un primate propio de la isla de Madagascar. Pertenece al grupo de los lémures. Su extraña apariencia hace que se le considere el principal responsable del origen de la palabra lemúr, que en latín significa «Espíritu nocturno». El aye-aye es el único representante vivo de su especie, lo que no hace más que exaltar su extrema rareza. Sólo se conoce otra especie próxima al aye-aye, el aye-aye gigante (Daubentonia robusta), que se extinguió hacia 1920.