La NASA lanzó el telescopio espacial Glast, un gran aparato que puede observar el universo mediante rayos gama.
El telescopio abrirá una nueva ventana sobre el universo y buscará señales que expliquen los mecanismos de aceleración de los pulsares. Además, rastreará vestigios de las supernovas y de los núcleos de galaxias activos.
Este aparato permitirá arrojar luz sobre numerosos misterios, como el de la materia oscura que forma cerca del 25% del universo. «Nos dará una visión espectacular de rayos gama de alta energía», aseguró recientemente a la prensa el científico David Thompson, segundo a cargo del proyecto.
Durante el primer año de la misión, Glast estará encargado de la cartografía completa de la bóveda celeste con una sensibilidad sin precedentes. El aparato dará una vuelta completa a la Tierra cada 90 minutos, lo que otorgará una visión del conjunto del cielo en dos órbitas, período equivalente a tres horas.
El costo total de la misión, incluido el lanzamiento, asciende a 690 millones de dólares, de los cuales 600 millones fueron financiados por Estados Unidos. El restante 10% incluye participación de Alemania, de Francia, de Italia, de Japón y de Suecia. Glast tiene una vida útil calculada en cinco años, con posibilidad de prolongarse hasta diez años.