El Cerro Uritorco.
El Cerro Uritorco se encuentra en la localidad de Capilla del Monte, en la provincia de Córdoba; Argentina. En torno a éste lugar se han entretejido miles de historias sobre Ovnis, vida extraterrestre, campos energéticos y hasta la leyenda de una ciudad oculta a la que los investigadores de lo paranormal denominan Erks. Y no es para menos, al aproximarnos al lugar comenzamos a percibir ver dos cerros que se alzan solitarios al cielo, como induciendo a pensar que en realidad no deberían estar en ese lugar. La historia del Cerro debe su fama a partir de presuntos avistamientos y hallazgo de extrañas huellas desde el año 1986.
Se cree, que en el interior de los cerros existen largos e interminables pasadizos o galerías que, en ocasiones, cruzan de un continente a otro, incluso por debajo de los océanos. La más extraordinaria de estas ciudades subterráneas en territorio argentino, sería Erks, una base extraterrestre que según los entendidos, puede detectarse dentro del denominado Triangulo de Terrera, cuyos vértices se asientan en el cerro Calaguala, en las cercanías de San Agustín, provincia de Córdoba; el otro vértice se encuentra en la localidad de Serrezuela y, su vértice noreste, se asienta en el Cerro Colorado, ambos también en territorio cordobés. La mencionada ciudad de Erks se ubicaría al noroeste del Sagrado Cerro Uritorco y en las cercanías de otro monte de la Sierra Chica, conocido como el Cerro Pajarito.
La ciudad escondida de Erks, Una base extraterrestre?.
Existen numerosas hipótesis que intentan explicar el origen de los fenómenos relacionados con la ciudad de Erks y con lo que acordaron en llamar el “Bastón de Mando”.
Resulta que durante la década del 30, en las cercanías del cerro Uritorco, fue encontrado un objeto del que se hablaría por muchos años. Formado de piedra balsámica negra pulida, y de forma muy cercana a la de un bastón, medía poco más de un metro y se aseguró que su antigüedad databa de 8 mil años. Fue bautizado como el Bastón de Mando o Piedra de Habla. Esta última denominación, a causa de las vibraciones que emitía el objeto. Quizá, para los que pudieron entenderla, significaba la voz del más allá que aportaba las respuestas siempre buscadas por los hombres.
Según los historiadores, el origen de éste Bastón era en realidad un poco menos sobrenatural y se debe a razones propias de los antiguos habitantes de la zona: Los indios Comechingones.
Esta ciudad subterránea de Erks, cuyas entradas nadie ha podido descubrir, es poseedora de los tres espejos sagrados, mediante los cuales sus sacerdotes o maestros pueden contactarse directamente con otras ciudades secretas, con las naves cósmicas que se desplazan por el espacio y también penetran en Erks, y con el denominado Reino Supremo, que se ubica en el Cosmos. Durante las noches, la ciudad subterránea de Erks ilumina los cerros y las quebradas con una tenue luz blanquecina; pero cuando las naves cósmicas abandonan el recinto, desplazándose por encima de la sierra con sus luces blancas y brillantes, la superficie de los campos se torna iridiscente a causa del mensaje de paz y de amor que irradian sobre los hombres que las contemplan.
En la ciudad secreta de Erks supuestamente existen maestros cósmicos que no viajan en las naves luminosas, dedicándose a la regencia del reino subterráneo. El sacerdote Kitiuma es el regente absoluto de la ciudad de Erks, dentro de esa milenaria urbe de los espejos vive también el sacerdote Watuma o Guatuma, primer miembro del Consejo, quien firma decretos y autoriza el ingreso de todos aquellos seres y humanos que han sido formados metafísicamente en la dimensión cósmica, lo cual ha despertado su intelecto superior.