La historia paranormal del Hotel Littlecote

Fuente: Polizones

En Inglaterra, mas puntualmente en la zona de Wiltshire Hungerford se encuentra el antiguo y misterioso hotel Littlecote. Este hospedaje se sitúa en una mansión muy lujosa de estilo Túdor rodeada de un verde paisaje de 24 hectáreas, pero además de huéspedes transitorios, también alberga entidades que pertenecen a otro mundo.

Tanto el personal que trabaja en el hotel como los visitantes, han declarado haber visto cosas que no estaban allí y que escapan al raciocinio. La aparición más recurrente es la de un perro negro que se pasea por las habitaciones y que no hace más que observar a los vivos que quedan perplejos ante su presencia, pero también se ha divulgado el caso de un hombre que sufrió severas lesiones cuando una misteriosa esfera de luz lo empujó contra una pared.

La historia de la Madre Barnes

La Madre Barnes era una partera que vivió en la mansión por el siglo XVI y siglos más tarde muchas personas afirman haber visto su imagen deambulando por los jardines.

La historia de esta mujer también está enlazada con un acontecimiento sangriento. Ella fue la que trajo al mundo al ilegítimo hijo de William Darrell con una de sus tantas amantes.

El hombre mató al bebé apenas nació arrojándolo al fuego del hogar de un cuarto que luego fue bautizado como la habitación maldita. Desde entonces es que en este sitio en particular puede oírse el llanto desgarrador del niño y se lo ha visto siendo cargado por una mujer, aunque también este fenómeno se repite fuera de la casa.

La habitación encantada es la que mayor actividad paranormal presenta en comparación con el resto del hotel. Razón por la que un grupo de espiritistas realizó una sesión en la que uno de ellos pudo ver a una mujer meciendo un bebé a la vez que hablaba con un hombre.

Durante la noche que duró la investigación, el resto del equipo fue testigo de extrañas sombras negras que se movían en el mismo cuarto; experimentaron bruscos cambios de temperatura, se rompieron sin motivo aparente muchos equipos de grabación los que curiosamente dejaron de fallar al momento de dejar las instalacionesdel del Hotel Littlecote.

Actualmente el hotel se encuentra en funcionamiento y alberga a centenares de visitantes los que acuden por curiosidad ante la leyenda y otros por la fastuosidad de sus instalaciones… ahora que sabes la historia, ¿te animarías a pasar una noche en la habitación maldita?

Algunos mitos populares…

Usamos el 10% del cerebro?

Los Seres Humanos no usamos sólo el 10% del cerebro. El mito se debe al descubrimiento de las células gliales, que unen al resto de las neuronas y se encuentran en proporción de 1 cada 10. Si eso tuviera algún sentido, las moscas serían más inteligentes que Einstein, porque tienen 10 células gliales por cada neurona. En realidad, usamos el 100% del cerebro, pero nunca al mismo tiempo porque se nos pararían los pelos .

Los sabores y la lengua

Contrariamente a eso que antes se enseñaba, de que hay una parte de la lengua para lo amargo, otra para lo salado, etc., los diferentes sabores pueden ser detectados en cualquier parte de la lengua, aunque hay algunas zonas ligeramente más sensibles a determinados sabores, las cuales varían de una persona a otra. El famoso «mapa de la lengua» está basado en una desafortunada traducción de un estudio alemán poco serio, de 1901, realizada por un psicólogo de Hardvard. Tanto se arraigó esta creencia que algunos la siguen creyendo aún sabiendo que no es así.

Como Quitar el Hipo?

Un hilo en la frente para quitar el hipo. Es tradicional que a los recién nacidos y lactantes que tienen meteorismo y presentan hipo por irritación del diafragma, les pongan las madres un hilo mojado pegado sobre la región central de la frente del niño.

El asustar a alguien con hipo es otra supuesta técnica que evita que el mal continúe. También lo es tomar un número impar de tragos sin respirar. O sencillamente no respirar durante algunos momentos. Entre otros…

Colgantes y Amuletos

Es frecuente que prendidos a la ropa, en los dedos o en la mano (más frecuente en etnia gitana o inmigrantes sudamericanos) o en las sabanillas de la cuna o moisés les pongan algún objeto de color rojo, colgante en forma de mano, o de otro tipo, con la creencia de que ahuyentan espíritus maléficos. En la tradición cristiana es habitual ponerle al niño los escapularios con imágenes de la Virgen o de Santos, o con alguna reliquia (flor, piedrecita) que ha sido bendecida en algún lugar de peregrinación o santuario.

El cabello dañado

No hay cura para las puntas secas y dañadas (florecidas) del cabello. A pesar de que muchos productos aseguran poder revertir el proceso, una vez que la punta se rompe, no es capaz de volver a crecer sana (de hecho, no crece de ninguna manera, porque el pelo no tiene vida, es una secreción). Lo que hacen los shampooes y acondicionadores es suavizar las puntas con moléculas que se enganchan y rellenan los huecos de las puntas = maquillaje. Científicamente hablando, la única cura es un buen peluquero.

Vestidos y adornos rojos para el sarampión

La creencia popular (y la certeza científica) de que el sarampión provocaba graves complicaciones en los niños, entre otras la encefalitis y en otros tiempos también la muerte, hacía que los padres luchasen porque el niño presentase un exantema morbiliforme lo más intenso posible. El sarampión debía de brotar con intensidad, porque de lo contrario “se metía por dentro” y eso significaba mayor gravedad.

Para lograr que la erupción fuese intensa se le ponían vestidos rojos, ropa de cama rojas y hasta las cortinas de la habitación. Tenía su findamento, puesto que la conjuntivitis sarampionosa provocaba una fotofobia importante y evidentes molestias por la luz, con lo que estas prendas rojas atenuaban la intensidad de la luz solar o artificial.

Además la conjuntivitis era tratada con lavados de manzanilla y se solía pasar alguna planta por lo ojos como el rabogato.

Cortar el babeo de los bebés!

Este mito sobre los bebes se refiere a no limpiarles la baba, debido a la salivación abundante que presentan los lactantes desde los dos meses de vida y sobre todo en el periodo de erupción dentaria. El «cortarles la baba» podría provocar alteraciones orgánicas en el niño e incluso déficit de crecimiento.

El Mal de Ojo

Es costumbre extendida y mito, entre la población rural, el considerar que en numerosas ocasiones en que el niño enferma es provocado porque le “han hecho mal de ojo”.

Esto significa que el niño no tiene ninguna enfermedad orgánica, sino que sus problemas (llanto, pérdida de apetito, vomitos, decaimiento, etc), se deben exclusivamente a que alguna persona ha ejercido sobre este pequeño personaje su influencia mágica y maligna, de tal modo que el bebé o chico mayor comienza a alterarse y presentar una sintomatología rara, que en algunas ocasiones y según creencia, puede llegar hasta ocasionarle la muerte.

Descubren la Atlántida a través de Internet

Un científico británico encontró a través de Google Earth, un lugar en el Océano Atlántico qué podría tratarse de la antigua ciudad perdida.

Una imágen satelital obtenida a través de los mapas de Google captó lo que podría ser una ciudad subacuática, ubicada a unos mil kilómetros de la costa oeste de África, cerca de las Islas Canarias, y se especula que podría tratarse de la mítica ciudad perdida de Atlantida.

En la foto satelital puede verse una serie de líneas paralelas y perpendiculares, encuadradas en un plano simétrico y rectangular que asemeja al de una metrópolis. La supuesta ciudad perdida tiene entramado «demasiado grande y organizado para haber sido causado naturalmente», informó el diario británico The Sun.

El plano fue descubierto por Bernie Bamford, un ingeniero aeronáutico inglés de 38 años, que investigaba a través de Google Ocean, una versión de Google Earth desarrollada para examinar las corrientes del océano y el lecho marino . Las líneas «parecen hechas por el hombre», y el rectángulo tiene el tamaño de Gales, dijo a The Sun el ingeniero, proveniente de la ciudad de Chester.

La presunta ciudad perdida está en las coordenadas de 31º 15′ 16″ Norte y 24º 15′ 31″ Oeste en el Océano Atlántico, unos 990 kilómetros al oeste de la costa occidental de África, cerca de las Islas Canarias. La ubicación coincide con el lugar donde estaría la ciudad perdida de Atlántida según las narraciones míticas.

La leyenda de la Atlántida cobró vida en la época antigua cuando el filósofo griego Platón, habló de ella en sus textos Timeo y Critias. El discípulo de Sócrates, cuenta que existió una potencia naval «más allá de las Columnas de Hércules» (como llamaban entonces al Estrecho de Gibraltar) que conquistó partes de Europa y África occidental alrededor del año 10.000 A.C. Después de un fallido intento de invadir Atenas, según Platón, la Atlántida se hundió al fondo del océano «en un sólo día de infortunio».

«Ese sitio es uno de los lugares más prominentes sobre la ubicación sugerida para la Atlántida, como fue descripta por Platón. Merece ser analizado en detalle», afirmó a The Sun el profesor Charles Orser, curador de arqueología histórica de la New York State University y una eminencia sobre los estudios de la Atlántica, quien además calificó el hallazgo como «fascinante».

Literatura sobre el continente perdido:

La leyenda de la Atlántida fue la inspiración de varias obras de literatura como Veinte mil leguas de viaje submarino (1869), de Julio Verne; La Atlántida (1919), de Pierre Benot; y Corazones en la Atlántida (1999), de Stephen King. También hubo versiones cinematográficas como El Continente Perdido (1961), La Ciudad de Oro del Capitán Nemo (1969), Los Conquistadores de Atlantis (1978) y Atlantis: El Imperio Perdido (2001).

Google Earth, un programa que permite ver imágenes satelitales y mapas de todo el planeta, ya tiene antecedentes de colaboración con la ciencia: en mayo pasado permitió a un grupo de arqueólogos descubrir un nuevo yacimiento en Grecia.