Esta sorprendente fotografía fue tomada por casualidad en una de las escalinatas que llevan hacia la cima del cerro San Bernardo de la ciudad argentina de Salta. Se conoció hace algun tiempo a través de las redes sociales y su autora es una joven salteña.
La toma se realizó aproximadamente a las siete de la tarde, en la escalinata que se encuentra junto al cruce con el cerro 20 de Febrero. Ese día, durante un fin de semana largo, la visita de familiares de otras provincias procuró una visita al cerro vigía de la ciudad. En un tramo de la caminata de ese día, se tomó esta foto. Cuál sería la sorpresa, días después, al ver que en la toma aparecía esta figura de cuya existencia nadie se había dado cuenta en el momento del hecho.