El Roswell Argentino

El sábado 6 de mayo de 1978 ocurría uno de los casos más misteriosos y nunca resueltos en la zona norte de Argentina en su límite con Bolivia. Ese día, varias personas vieron como un extraño objeto caia del cielo seguido por una gran explosión, que provocó remezones de tierra. Una columna de humo negro y denso subió por varios centenares de metros, y una extraña sensación de «cambio de aire» fue experimentada por la gente. Los animales huian inexplicablemente. El fenómeno afectó a campesinos de varios kilómetros a la redonda del cerro El Zaire, ubicado en Tarija, Bolivia, en el límite con Salta (norte de Argentina).

Eran aproximadamente las 17,30 horas en la República Argentina, cuando personas de distintos poblados del norte de Argentina y sur de Bolivia vieron un objeto de forma ovoide, acerado, que desprendía una estela de humo y se precipitaba a gran velocidad. Seguidamente se escuchó una gran explosión que ocasionó en varios lugares el desbande de animales. Inmediatamente, unos remezones de tierra que confundieron con temblores y finalmente una gran columna de humo negro.

La región salteá en donde ocurrió éste fenómeno, está cubierta por una selva subtropical de muy tupida vegetación, conocida como Las Yungas, se encuentra allí el Parque Nacional El Baritú, que guarda uno de los biomas más vírgenes del país. El calor, la humedad y la frondosa vegetación fueron factores que jugaron en contra de los expedicionarios que fueron, desde Salta, en busca del objeto precipitado.

Desde Bolivia, inmediatamente, fueron enviados varios aviones a reconocer la zona. El diario Boliviano «El Potosí» publicaba por esos días esta noticia:

….»el Grupo Aéreo de Cobertura Militar, con asiento en la base de Tarija, destacó varios aviones, a los que más tarde se agregó un helicóptero, al lugar del impacto. La operación estaba a cargo del Teniente Coronel Julio Molina. Cuando el Teniente Osvaldo Prado localizó el punto exacto de la colisión, se fotografió el inusitado y tremendo «desmoronamiento» en la ladera sur del cerro El Zaire, donde un enorme hoyo, de unos 300/400 mts., con 400/500 mts. de ancho y más o menos 1.500 mts. de largo, quedaba como vestigio indudable del fenómeno….»

Los testimonios de la gente de las distintas localidades afectadas coincidirían invariablemente en tres puntos: Una fuerte explosión, el movimiento telúrico que se sintió inmediatamente y la columna de humo negro que se levantó. Continuar leyendo «El Roswell Argentino»