Un equipo internacional de astrónomos ha descubierto dos planetas nunca observados hasta el momento que orbitan alrededor de la estrella de Kapteyn, una de las más viejas cercanas a nuestro propio Sol, a (solo) 13 años luz de la Tierra.
Uno de esos mundos se encuentra a la distancia adecuada de su astro como para albergar agua líquida en su superficie, lo que aumenta la deseada posibilidad de que pueda ser habitable. kapteyn-b La estrella de Kapteyn recibe el nombre del astrónomo alemán que la descubrió al finales del siglo XIX, Jacobus Kapteyn.
Es la segunda estrella más rápida del firmamento y pertenece al halo galáctico, un grupo de estrellas que orbita nuestra galaxia en órbitas muy elípticas. Con un tercio de la masa del Sol, esta enana roja puede ser vista con un telescopio de aficionado en la constelación austral de Pictor. Continuar leyendo «Descubren un planeta relativamente cercano que puede ser habitable»
La ardua tarea de enviar una nave al espacio supone analizar miles y miles de datos y parámetros, utilizando superordenadores para realizar innumerables cálculos con el objetivo de conseguir una precisión exacta. El Universo es una inmensa mesa de billar en la que las bolas se encuentran a distancias enormes moviéndose además a velocidades vertiginosas. En todo este proceso, el más mínimo error puede dar al traste con muchos años de trabajo.
Sin embargo enviar una misión espacial desde la Tierra hasta un planeta del sistema solar no es tan fácil como podríamos pensar. Para alcanzar cuerpos planetarios lejanos necesitamos una carga de combustible demasiado alta y los ingenieros espaciales deben aprovechar las carambolas cósmicas que la gravedad les ofrece.
Sin estas maniobras de asistencia gravitatoria las misiones espaciales a muchos planetas hubieran sido virtualmente imposibles. ¿En qué consisten? Bueno, en este caso, explicarlas es mucho más sencillo que realizarlas puesto que a grandes rasgos tan solo se trata de aprovechar la gravedad de satélites o planetas bien para disminuir la velocidad de una nave espacial o bien para relanzarla hacia su destino.
Se llevan utilizando desde la década de los ’70 cuando los técnicos de la NASA utilizaron por primera vez la gravedad de Venus, curiosamente no para empujar sino para frenar la sonda Mariner 10 en su camino hacia Mercurio.
El ejemplo más alucinante de estas maniobras es sin duda alguna la misión interplanetaria de las Voyager 1 y 2, lanzadas en el año 1977 y que aprovecharon un poco frecuente alineamiento planetario que permitió utilizar el tirón gravitatorio de, no uno, sino dos planetas (primero Júpiter y después Saturno) para conseguir su impresionante viaje hacia las profundidades del Sistema Solar.
La sonda Galileo por su parte, supuso ya la perfección en el manejo de estas maniobras de asistencia gravitatoria puesto que se aprovechó del empuje de varias lunas y planetas para llegar a Júpiter. Incluso llegó a orbitar la Tierra utilizando nuestra propia gravedad para adquirir velocidad antes de emprender su vuelo hacia el gigante gaseoso. Continuar leyendo «Un misterio que lleva décadas intrigando a la NASA y la ESA»
La CNN reconoce que el Sol es parte de un sistema binario, cuyo hermano es una Estrella Marrón que contiene al mítico Planeta X o Nibiru.
Pese a las innumerables presiones, la aparente verdad finalmente ha llegado hasta la propia CNN. Sin importar la censura, y aunque sea durante unos breves 32 segundos, la CNN, ha conseguido captar la atención de los más escépticos, incluso de aquellos que no deseaban que esta información saliera a la luz. Continuar leyendo «La CNN reconoce la existencia de Nibiru»