Los vecinos Woodland en Inglaterra, oyen por las noches un extraño sonido de baja frecuencia que nadie ha sabido explicar hasta el momento.
Para algunos habitantes de de éste pueblo de apenas 300 habitantes, en el condado inglés de Durham, acostarse se ha convertido desde hace meses en una tortura cotidiana. Alrededor de la medianoche, empieza el ruido: un sonido grave, continuo, a un volumen casi inaudible, que acaba agigantándose en su cabeza hasta impedirles conciliar el sueño.
Lo han comparado con el molesto motor de un coche aparcado en las inmediaciones, o con el rumor lejano de una maquinaria que parece incongruente en esta zona de granjas. Quienes lo perciben aseguran que cesa a las cuatro de la madrugada: «Entonces es la gloria, porque vivimos en un lugar aislado sin tráfico. Pero deja un murmullo en tu cabeza durante el resto del día», ha declarado al ‘Daily Telegraph’ una vecina del lugar, Marylin Grech.
El problema, claro, es que muchos residentes no oyen nada y siguen durmiendo como benditos, agradecidos al silencio de la campiña, así que persiste la duda de si el ruido existe de verdad.
«Es como una línea eléctrica sobrecargada», ha descrito otro de los afectados, Kevin Fail, convencido de que el sonido misterioso procede de los antiguos pozos mineros. Otra versión lo atribuye al sistema de calefacción de alguna casa del entorno. Los que lo escuchan han cumplido con todos los rituales domésticos posibles para identificarlo: desconectar los electrodomésticos, cerrar todas las llaves de paso, salir de patrulla por las calles desiertas y, por supuesto, taparse los oídos, para comprobar si la fuente de tanta inquietud se esconde en algún rincón de su cerebro: Continuar leyendo «Sumbidos Misteriosos en un pueblo Inglés»