5 sonidos misteriosos que nadie ha podido explicar

¿Alguna vez te volviste loco al escuchar un sonido que no logras identificar? ¿Qué puede ser? ¿El viento moviendo las ramas de los árboles? ¿Un pájaro que logró entrar al edificio? ¡Es desesperante! ¿Acaso nadie más lo escucha? Ah, no cerré bien el grifo…

Imagina llevar esto a una escala mayor: un sonido tan misterioso que no solo una persona, sino la humanidad entera no puede identificar. Esto sucede más seguido de lo que imaginas y muchas veces la curiosidad de los científicos e investigadores por identificarlos es tanta como la nuestra por encontrar qué rayos es eso que no para de hacer «toc toc». A continuación te mostramos 5 ruidos que, aún hoy, nadie ha podido explicar.

Upsweep

No todos estos ruidos misteriosos vienen de rincones desconocidos del espacio, algunos provienen de rincones desconocidos de nuestro propio planeta. «Upsweep», por ejemplo, es un sonido detectado por el sistema de vigilancia sónica (SOSUS) que se encuentra en el Océano Atlántico.

Su punto más alto se da en la primavera o en el otoño y proviene de zonas donde habría actividad sísmica volcánica, pero nadie está muy seguro de qué lo provoca.

UVB-76

​A veces estos sonidos vienen de más cerca y no podemos explicarlos no tanto porque no tengamos idea de su origen o propósito, sino porque no podemos confirmarlo. Ese es el caso de la estación de radio UVB-76, también conocida como «el timbre» o, en inglés, «the buzzer».

Desde su detección, en 1982, esta estación ubicada en Rusia emite una especie de timbre o zumbido las 24 horas del día a una frecuencia aproximada de 25 timbres por minuto. Muy de vez en cuando, la señal se interrumpe y se escuchan voces hablando en ruso que, entre otras cosas, incluyen listas de nombres. En algunas ocasiones, hasta se han escuchado conversaciones.

La teoría más aceptada, es que se trataría de alguna transmisión militar rusa, ya sean códigos o una simple señal de que la estación está abierta a comunicaciones.

Explosiones misteriosas

Escuchar sonidos similares a disparos o explosiones no es tan raro. Desde un camión grande pasando por un desnivel en la calle, hasta un caño de escape, hay muchas causas que pueden provocar esta clase de sonidos. Sin embargo, en Estados Unidos se ha detectado un fenómeno un poco diferente.

Se han registrado varios casos a lo largo del tiempo y del país en que testigos declararon haber escuchado una fuerte explosión, incluso sintiendo un leve temblor en el piso, y nadie parece poder asegurar las causas. El misterio es tal que el Servicio Geológico de los Estados Unidos se ha involucrado, siguiendo la teoría de que podría tratarse de terremotos muy pequeños. Otra posible teoría, es que se trate de booms sónicos causados por aeronaves militares.

El zumbido de Taos

Todos estos sonidos son muy interesantes, pero no parecerían tener un gran impacto en nuestras vidas. Este último, sin embargo, resultó ser bastante persistente y molesto. No todos pueden escucharlo, pero en la localidad de Taos, en Nuevo México, muchos declaran percibir un sonido de baja frecuencia similar a un zumbido.

Aunque hay varias teorías, nadie sabe qué provoca este fenómeno que también se ha detectado en otros pueblos. Para el 2 % que sí puede escucharlo, puede resultar extremadamente molesto y en algunos casos hasta provoca síntomas físicos.

 

La misteriosa transmisión de la UVB-76

Misteriosas señales de onda corta

Durante la década de los años ochenta, un radioaficionado detectó por casualidad un extraño y persistente zumbido en la frecuencia 4.625kHz con su receptor de onda corta. El sonido se repetía 30 veces por minuto, durante todo el día, todos los días del año.

Se desconoce cuándo comenzaron las emisiones, sin embargo, al parecer fue en el año 1982 cuando fueron oidas por primera vez. El descubrimiento no tardó en trascender entre los radioaficionados llegándose a convertir en un verdadero misterio el verdadero objetivo de ésta enigmática transmisión.

Como suele ocurrir con todo lo desconocido, comenzaron a formarse opiniones y posibles explicaciones para explicar el fenómeno. Pero antes de contar alguna de ellas, veamos que sucedió a lo largo de los años con la señal.

Desde su descubrimiento y hasta el año 1990, la emisora siguió emitiendo la misma programación. En este último año cambió su repetitivo pitido por un zumbido de 0.8 segundos de duración. De manera constante, se emitía el zumbido unas 21 o 34 veces por minutos, dejando intervalos de 1 o 1.3 segundos entre un zumbido y el siguiente. Durante el último minuto de cara hora, el zumbido cambiaba por un tono continuo que duraba todo el minuto.

Dicha señal volvió a cambiar el 16 de enero de 2003, cuando se alargó la duración de los tonos que, además, pasaron a ser más agudos. Aunque, desde entonces, se ha vuelto a la señal anterior.

Desde su descubrimiento, ésta inquietante radio ha emitido ininterrumpidamente durante más de veinticinco años, las veinticuatro horas del día, con una potencia de 10 kW y los 2,5 kW dependiendo del horario.

Localización de la UVB-76

El emplazamiento del transmisor se encuentra en los bosques cerca de Povarovo, en el oeste de Rusia, a unos 40 km al noroeste de Moscú. En el año 2004 un grupo de exploradores tomó fotografías a éstas antenas en las proximidades del lugar.

Misteriosas conversaciones en la UVB-76

Curiosamente no todos son pitidos y zumbidos ya que en ocaciones han podido grabarse conversaciones en ruso y otros ruidos de fondo. En la página que la Wikipedia destina a tal fin, se pueden encontrar actualizados los mensajes hablados que se han transmitido desde el decubrimiento de la UVB-7. Una de las charlas, por ejemplo, ocurrida el 3 de noviembre del 2001, dice: «Soy el 143. No recibo el oscilador»… «Esto es lo que la sala de operaciones está enviando» o «estas son las órdenes de operaciones». Continuar leyendo «La misteriosa transmisión de la UVB-76»