Una compañía constructora prácticamente destruyó una de las pirámides mayas más grandes de Belice con retroexcavadoras y topadoras para extraer piedras destinadas a un proyecto de construcción de caminos, dijeron las autoridades el lunes.
La destrucción de la pirámide Nohmul y la plataforma de su templo, erigidas hace unos 2.300 años, fue detectada la semana pasada, informó el doctor Jaime Awe, director del Instituto de Arqueología de Belice, quien dijo haberse disgustado profundamente al enterarse de la noticia. Sólo una pequeña porción del centro de la pirámide quedó en pie.
El centro ceremonial es el más importante del norte de Belice y está cerca de la frontera con México.
«Es un enorme sentimiento de incredulidad por la ignorancia y la insensibilidad… estaban utilizando esto para llenar caminos», indicó Awe. «Es como ser golpeado en el estómago, es horrendo».
Las fotografías de la porción restante mostraban lo que parecía ser una clásica cámara de arcos mayas que colgaba de una sección de la que se habían extraído piedras.
El complejo Nohmul se encuentra en un cañaveral privado y no tiene los márgenes de roca que frecuentemente se observan en sitios reconstruidos o pirámides mejor preservados.
Awe dijo que no era posible que los constructores confundieran la pirámide, que tiene unos 30 metros de alto (100 pies), con una colina natural porque las ruinas son bien conocidas y el paisaje de la zona es llano.
«Estas personas sabían que era una estructura antigua. Simplemente es una insolencia», agregó.
Fotos del lugar muestran retroexcavadoras retirando los extremos inclinados de la pirámide, dejando un aislado centro de adoquines de piedra caliza en el centro con lo que parece ser una estrecha cámara maya colgando sobre una sección excavada.
«Sólo darse cuenta de que los antiguos mayas adquirieron todo este material de construcción para levantar estas estructuras usando nada más que herramientas de piedra y excavando en la cantera, y que cargaban este material utilizando una faja apoyada en la cabeza», dijo Awe. «Y pensar que hoy en día contamos con equipos modernos, que se puede ir a excavar en una cantera en cualquier lugar, pero que esta empresa despreció completamente y destruyó completamente el edificio. ¿Por qué estas personas simplemente no se van y excavan en otra parte sin significado cultural? Estoy atónito».
La policía informó que está investigando y que es posible levantar cargos penales. La ley beliceña estipula que cualquier vestigio prehispánico está protegido por el Estado.