Ondas sonoras, electricidad y Nikola Tesla

Siempre ha habido terremotos y algunos sumamente violentos, como el terremoto de Krakatoa, (entre Java y Sumatra) en el año 1886. Tal es así, que se piensa de él como el más violento de la época reciente, (se calcula 9.5) y por ahora el techo de la escala Mercali, entre otras.

Nikola Tesla, es recordado no solo por las cosas que inventó y que utilizamos en la vida moderna (Como la energía eléctrica alterna, la distribución moderna de cargas, el motor alterno, el arranque eléctrico, etc., etc., sino también está inmortalizado en la medida eléctrica Tesla en forma universal, la transmisión eléctrica sin cables, de las frecuencias, la bobina que lleva su nombre, etc. , más los aportes a la física práctica y teórica, sus trabajos para lograr la televisión, sus aparatos demoledores por ondas hipersonoras, (adminículos que Tesla inventó ya bien entrado el siglo XX), sus comentarios sobre la teleportación, los viajes espaciales y temporales , etc. etc.

Hoy sería Croata, nació dentro del Imperio Austro-Húngaro, abandonó sus estudios de Ingeniería a la mitad, sus ideas excedían con mucho lo que esta carrera podía enseñarle. Viajó a lo que hoy es Eslovenia y posteriormente a los Estados Unidos, donde revolucionó todo con sus inventos, ganó dinero, pero no lo que su importancia merecía.

Tuvo algunos problemas debido a su genialidad y su carácter. Nunca los inventores han tenido una vida fácil y más porque el era misógino o algo más. Terminó sus días en una forma muy solitaria y su relación con los humanos en general fue mala , era muy inocente.

Todas sus pertenencias al morir (en el 1943) las confiscó el gobierno de USA, aparte del dinero que poseía. Desmantelaron sus caros últimos proyectos. Tesla no tenía reparos al decir que tenía una conversación fluida con personajes,…viajeros de otros mundos, con los que departía en ciencias y era ayudado a lograr los cambios trascendentes que imprimió a nuestras vidas, aún hoy. Yo le creo, su obra es netamente superior a su época.

También muchos hoy piensan en la ingeniería inversa que Tesla aplicó, sobre los conocimientos que se le transmitían y que hoy, el gobierno de USA, emplea a su vez sobre las genialidades de Tesla.

Hoy muchos atribuyen los terremotos, directamente a desarrollos norteamericanos sobre el vibrador de demoliciones de Tesla. Descreo formalmente que esto se utilice en esta forma, ya que jugar con las placas tectónicas, puede ser contraproducente: destruiría a todos, incluso al que poseyera esta arma.

Si, en cambio, este adminículo se usó para desarrollar, todos los aparatos que se utilizan para las prospecciones petroleras o mineras o las que se usan para estudiar las capas y núcleo de la tierra, su morfología, convectividad y características mensurables. Este método se asemeja – guardando las distancias – a los Doppler, usados en medicina, entre otras actividades y que basan sus funcionamientos en el sonido.

Tal vez por este último uso, muchos confundan y crean en esa arma, que hasta le han dado nombre: HAARP. Yo particularmente me resisto a creerlo.

El vuelo de las sirenas

Por Javier Navarrete (Enigmas num. 30)

Pocas imágenes resultan tan atractivas y sugerentes como la de la sirena. Su cuerpo híbrido, con rostro y torso de mujer y forma de pez de cintura para abajo, ha inspirado a poetas y narradores, ha poblado los sueños de pintores y navegantes y ha embellecido con su imagen bestiarios, emblemas y grabados. Entre todas ellas, ninguna más bella ni más misteriosa que la sirena de doble cola. Los canteros medievales tallaron la piedra con su forma para decorar numerosos templos románicos desde cuyos capiteles todavía contemplan, enigmáticas, al piadoso feligrés del siglo XX.

Al canto de las sirenas se atribuía tan poderoso hechizo que nadie podía sustraerse a su atracción y era la perdición de los navegantes que destrozaban sus barcos contra las escolleras por seguir su voz. Su imagen vive hoy en cuentos infantiles, películas de la factoría Disney, lienzos de pintores y objetos decorativos que van desde un pisapapeles hasta un alfiler de corbata. Su nombre se ha insertado en el lenguaje corriente para acuñar frases de sentido hecho, como «cuerpo de sirena», para referirse a la mujer de armoniosa figura, o «escuchar cantos de sirena» para aludir a quien oye algo bello aunque de tramposo fundamento.

Pero, ¿han existido realmente estos bellos seres acuáticos? Cristóbal Colón creyó ver alguno a lo largo de sus cuatro viajes transatlánticos. Crónicas más antiguas hablan de una sirena que recibió el bautismo y llegó a figurar como santa en algunos almanaques con el nombre de Murgen, capturada en el siglo VI al norte de Gales. Se cuenta de otra en 1403 que vivió en Harlem hasta su muerte y aprendió a hilar, aunque nadie logró entender su habla. Otros, por el contrario, niegan la existencia real de tales criaturas, como el renacentista Andrea Alciato, que habla de ellas en escéptico tono de burla: «Sin piernas, doncellas. Sin hocico, peces». Continuar leyendo «El vuelo de las sirenas»

Juego matemático: El Teorema de Fermat

Hace unos años leí que este teorema, por muchos siglos había permanecido sin resolución. Como tantas cosas en la vida parece mentira que haya permanecido durante tanto tiempo sin finiquitarse, que algo enunciado y encima con «pistas» no haya sido comprendido.

No se bien porque todavía me sorprende este hecho, si tan difícil es entender los vericuetos en la política, en lo social, lo económico, en las relaciones interpersonales, etc., la verdad es sumamente elusiva a nuestros ojos

El caso es que este genio enunció el famoso teorema, pero, o la muerte lo sorprendió antes de escribir la solución- que dijo haberla encontrado y que no era mucho más larga que el espacio del margen de una hoja- ya que tenía la inveterada costumbre de escribir en los márgenes de cuanto caía en sus manos, – o como otros suponen, la respuesta se perdió en el tiempo.

Lo cierto que muchos matemáticos y aficionados trataron de encontrar la solución, en diferentes épocas, en especial desde que una universidad francesa y otra germana instituyeran premios para quien resolviera el mismo.

Dicen que alguien lo logró, pero no lo se y no me consta, por lo que me ha servido de entretenimiento el creer resolverlo, tal vez porque aparenta no ser necesaria más que una dosis de matemática de nivel casi primario. Continuar leyendo «Juego matemático: El Teorema de Fermat»