Venta de fantasmas embotellados

Esta es la historia de Avie Woodbury, puedes creerlo o no, pero las cosas son como son y aqui va la historia de ésta mujer:

Avie Woodbury estaba tan cansada de ser asustada por la presencias de entes desconocidos que llamó a un exorcista para liberar su casa de dos fantasmas. El exorcista atrapó a los espíritus en botellas de agua bendita y ahora la señora Woodbury los ha puesto a la venta en el sitio de subastas de Internet, TradeMe.

El agua bendita anula la energía de los espíritus

Según sus propias palabras, «el agua bendita anula la energía de los espíritus los pone a dormir». Y además agregó – «No hemos tenido ninguna actividad desde que se embotellaron el 15 de julio de 2009, Así que creo que realmente están en las botellas».

Las ofertas en TradeMe ya se han disparado hasta USD $ 2,000 (£ 923). «Sólo quiero deshacerme de ellos, ya que me asustan», escribió la señora Woodbury, de Christchurch City, en Canterbury. «Pero a alguien les podrían gustar para jugar».

«Para revivir los espíritus, me han dicho que se deben verter en un recipiente pequeño y dejarlo evaporar en su casa», escribió en la web.

Las botellas son etiquetadas con cuidado para que los usuarios puedan saber qué los fantasmas están en su interior, afirmó. Woodbury dijo que había logrado identificar a uno de los fantasmas como un hombre llamado Les Graham, que murió en su casa en la década de 1920. El exorcista, de una iglesia espiritualista, le dijo que les gusta asustar a la gente, pero que es un fantasma débil. En cambio el otro espíritu, es una niña no identificada, y es considerablemente mucho más fuerte, dijo el exorcista.

Segun relata la señora. Woodbury al espíritu de la niña le gusta mover las cosas de lugar y hacer ruidos extraños.

Lo cierto de ésta historia es que la subasta ha atraído mucho interés, incluso entre personas que no creen en fantasmas. Tal vez con motivo de poder demostrar que todo se trata de un timo. Igualmente, parece que ésto de embotellar fantasmas no es algo nuevo; El St. Johns County, recidente de Estados Unidos, los vende desde el año 2008. En éste sitio puedes ver de que se trata : Fantasmas Embotellados

El fraude de los Garadiábolos

Entre las historias de monstruos y críptidos conocidas que resultaron por ser un fraude, una d elas más curiosas es la de los Garadiábolos. Transcurrían los años setenta y un jóven profesor de educación física llamado Alfredo Garcia Garamendi, dijo haber encontrado en las profundidades de un un río de Puerto Rico, denominado las cabras, una especie desconocida con forma de pez y características similares a las de un humano. El extraño fenómeno tenía la capacidad para vivir en el agua y en la superficie, ya que su morfología le permitía adaptarse a cualquiera de éstos dos medios. Su constitución física era antropomórfico y algunos de sus rasgos eran realmente diabólicos, por lo que Garamendi lo había denominado «Garadiábolo».

La extructura osea de éste animal era similar a la de los humanos a excepcion de la cola y las alas. El rabo aunque muy parecido al de el mono, estaba dotado de varias aletas marinas. Las patas eran de estructura cartilaginosa cubiertas de mas a carnosa; partian de la pelvis y se alargaban hasta terminar en la punta, sin pies. El torax constaba de diadragma, esternon y una serie de costillas rudimentarias a ambos lados. La pelvis , aunque muy simple, cruzaba las caderas del extremo a otro de su cuerpo, formando una ligera curvatura en el centro, la columna vertebral nacia en la base del cuello y terminaba en la punta de la cola.

Garamendi, en su historia, relató como habían tenido que luchar contra éste animal ya que su naturaleza era agresiva hasta que finalmente lograron capturarlo aunque lamentablemente sin vida.

Como ocurre con la mayoría de las historias de éste tipo, Garamendi y su equipo de buceo tomaron fotos de la criatura y enviaro las imágenes a la Universidad de Puerto Rico con el propósito de descubrir su verdadero origen. Pero las fotografías no eran suficiente para establecer alguna hipótesis.

Solicitó no mencionar sobre este especimen a los medios y se reservó el hecho de enviar cualquier fragmento del especimen aportando algunos datos como las fotogafías y algunas radiografías obtenidas a los pocos días de la supuesta captura.

Efectivamente, su interés de no aportar pruebas encubría el hecho de que todo era simplemente un burdo fraude.

Al no poder aportar pruebas tangibles, Garamendi recurrió a otra mentira diciendo que e animal había sido confiscado por un grupo de personas que decían ser especialistas en biología marina, provenientes de Estados Unidos. Poco después alargaría el fraude e, incluso, llegaría a escribir un libro sobre estos extraños seres llamados «Garadiábolos».

A través de las fotografías, los científicos lograron descubrir que el Garadiábolo era una especie de peces mantarrayas cuya apariencia es distorsionada tras cortar las aletas y seccionar su cola en tres partes, dos en piernas y la central en una cola.

Historias de Fantasmas: Stephen Decatur

Sthepen Decatur fue un de los protagonistas de la historia americana y un auténtico compatriota y héroe de guerra entre los años 1812-1820. Fue uno de los tres Comisionados que se negó a incorporar al Comodoro James Barron. Barron consideró que Decatur debió asignarlo a su puesto y, por esta razón, le desafió a un duelo ilegal haciéndolo fuera de los límites y cruzando el río Bladesburg.

El día anterior al duelo, Decatur observó por la ventana de su casa con un rostro de tristeza, ya que e había ocultado a sus familiares y amigos lo que iba a hacer. El día del duelo fue un 21 de Marzo, llegó al sitio establecido y allí se enfrentó con Barron. Al momento de disparar Decatur apuntó hacia el cielo y disparó la pistola, mientras que Barron con un semblante contentó apuntó hacia él y disparó en su estómago descargando su pistola de un fogonazo.

Pasando unas horas de agonía y sufrimiento, Decatur murió 24 horas después de aquel trágico duelo. Tras cumplir un año, la sirvienta personal pudo verle asomado en la ventana del segundo piso, llevando el traje con el que había muerto. Continuar leyendo «Historias de Fantasmas: Stephen Decatur»