La extraña desaparición de James Worson

El 03 de septiembre 1873 James Burne Worson, un hombre de Warwickshire, Inglaterra, literalmente, desapareció en el aire, sin dejar rastro en cuanto a cómo sucedió, o dónde iba. O al menos eso dice la leyenda.


James Worson había aceptado un desafío para correr en tiempo récord desde el pueblo de Leamington hasta el pueblo de Coventry, un trayecto de 32 kilómetros. Había estado presumiendo su condición física y su habilidad de correr, por lo que se le pidió que lo probara, así que con un buen espíritu deportista se propuso a hacer exactamente eso.

Dos amigos, Hammerson Burns y Barham Wise lo siguieron de cerca en un vehículo jalado por un caballo. Burns llevó consigo su cámara. Worson nunca se apartó de su vista, y volteaba continuamente para compartir algunas amistosas palabras.

Worson logró los primeros kilómetros, con alegría, riendo y llevando a cabo una animada conversación con sus rivales, cuando inesperadamente, el equilibrio dio paso y tropezó, cayendo hacia el suelo con apenas el tiempo para un corto y penetrante grito. Wise diría después, “Fue el sonido más espantoso que cualquiera de nosotros alguna vez ha escuchado.” Pero mientras caía Worson hacía adelante con tan terrible grito, en lugar de caer al suelo como parecía que estaba por hacerlo, de desvaneció completamente a media caída, incluso antes de tocar el suelo.

Wise tomó fotos del suelo, y este parecía relatar la misma historia, las pisadas de Worson que se encontraban en la suciedad del suelo, parecían tambalear y desaparecían. Se organizo una búsqueda y se llevó a cabo una investigación ya que se sospecho que Burns y Wise lo habían asesinado, pero la investigación no encontró nada para respaldar la acusación. Los perros de búsqueda utilizados se mostraron renuentes a acercarse al punto donde Worson desapareció. Jamás se volvió a escuchar o a saber de el. Continuar leyendo «La extraña desaparición de James Worson»

La reencarnación de Shanti Devi

En 1930, a la edad de 4 años, Shanti Devi de Delhi, India, le dijo a sus padres que había vivido antes en un lugar llamado Muttra (ahora conocido como Mathura), que había sido madre de tres hijos, que murió a causa del parto, y que su nombre anterior era Ludgi.

Sus padres naturalmente no creyeron a la niña y ella escapó de casa cuando tenía 6 años tratando de llegar a la Aldea, pero no pudo.

Debido a que la niña relataba continuamente la historia y conocía el dialecto de la aldea, el director de su escuela investigó y encontró un comerciante cuya esposa había muerto de complicaciones de parto, el nombre de la mujer era Ludgi Devi.

El caso incluso llamó la atención de Mahatma Ghandi, quien creó una comisión para que investigara el caso. Llevaron a Shanti a la aldea, donde ella comenzó a hablar el dialecto local y reconoció a su marido e hijos de una vida previa.

Incluso dio 24 precisas declaraciones que coincidieron con hechos sobre la vida de Ludgi. La comisión concluyó que Shanti Devi era realmente la reencarnación de Ludgi Devi.

El Misterio de Los Objetos malditos

Existen objetos que tienen tras de sí infranqueables maldiciones. Tal es el caso del Diamante de la Esperanza, del Zafiro Púrpura de Delhi y del coche de James Dean. Pero también hay otros objetos que son malditos en el sentido de traer malas energías: muñecos vudú, cráneos, símbolos satánicos, etc…

Un objeto maldito es algo que puede comprenderse de las siguientes formas: o bien como un objeto que simplemente atrae mala energía; o ya, en sentido estricto, como un objeto que atrae mala energía y está ligado a una maldición concreta.

Existen diversos criterios para clasificar a los objetos malditos. Uno de ellos es el carácter individual o el carácter genérico del objeto: de ese modo, el auto de James Dean pertenecería a la primera clase, mientras que las estatuillas de Satanás y los muñecos de vudú a la segunda clase.

Célebres Objetos Malditos

La Piedra Maldita de Carlisle

Desde hace unos cuantos años, al pueblo inglés de Carlisle le han caído inundaciones, fiebre aftosa, altos índices de desempleo, y una indiscutible decadencia en su equipo de fútbol. Para las autoridades locales y la mayoría de pobladores, la culpa la tiene la “Piedra Maldita”, una gran roca en la cual yace grabada una maldición escrita en el año 1525.

El origen de la Piedra Maldita se remonta al año 2001, cuando el artista Gordon Young, por encargo del ayuntamiento, grabó sobre una gran piedra la maldición que, en el año 1525 y en base a varios libros, el arzobispo de Glaslow creó “contra los que osaran saquear, destruir o robar en sus territorios ”. Una maldición compuesta de 1069 palabras, inicialmente destinadas a los “bárbaros del norte, que hacían incursiones en la región”. Continuar leyendo «El Misterio de Los Objetos malditos»