Todo sobre los fantasmas

Los fantasmas, palabra que proviene del griego y cuya traducción literal es «aparición», en el folclore de muchas culturas, son supuestos espíritus o almas desencarnadas de seres muertos.

Según distintas suposiciones se manifiestan entre los vivos de forma perceptible (por ejemplo, tomando una apariencia visible, produciendo sonidos o aromas o desplazando objetos), principalmente en lugares que frecuentaban en vida, o en asociación con sus personas cercanas.

Constituye uno de los tipos más conocidos de superstición.

Quienes dicen haberlos visto los describen como siluetas o sombras oscuras o blanquecinas, más bien difuminadas o nebulosas, antropomórficas, de carácter inmaterial y trasparentes a veces, que flotan y pueden no tener contorno definido a sus pies. Su aparición no suele sobrepasar el espacio de un minuto, muy raramente más de diez, y cuando ocurre la temperatura baja sensiblemente, a veces junto a olores penetrantes, ruidos, golpes, música o voces. Su aparición provoca ulteriormente en los seres humanos de su entorno una cierta fatiga, y poseen una carga electromagnética que puede ser medida.

Como las leyendas etiológicas, están ligados a un lugar, una leyenda o un mito; realizan siempre los mismos actos repetitivamente; su actitud no suele ser comunicativa, pero es a veces consciente y termina siendo esquiva y huidiza, hasta el punto de que podría decirse que parecen tener miedo de los seres vivos; sólo unos pocos de ellos son abiertamente hostiles o benéficos. Algunas veces han sido vistos y grabados traspasando muros sólidos; algunos pueden mover leves pesos. Obedecen a las leyes de la perspectiva, según el punto del espacio desde el que se los contempla; muchos parecen sólidos y opacos, por lo que pueden ser filmados; se reflejan en los espejos y producen ruidos sincronizados con sus movimientos (pasos, etc). Generalmente dan la impresión de ser tan reales como las personas vivientes, aunque sólo durante un período limitado. Continuar leyendo «Todo sobre los fantasmas»

La NASA intentará desviar un asteroide que podría impactar en la Tierra

Cada cinco o diez años un asteroide del tamaño de un autobús escolar se acerca a la Tierra, y cada 50 años uno de éstos impacta en ella.

Un ejemplo de ésto es que la Agencia Espacial de Rusia mantiene en su página web el resumen de un documental llamado Ataque asteroide, del astrofísico Vladimir Lipunov. En éste video pueden verse imágenes del gigantesco estallido producido por el impacto de un meteoro }que cayó sobre Rusia en el año 2013 y que por fortuna, no causó desastres de mayor envergadura por haber caído en una zona ampliamente desierta de Siberia.

No es una novedad que desde hace muchos años, la ciencia está empeñada en investigar los asteroides, especialmente aquellos cuya trayectoria podría ser tal que al aproximarse a la Tierra y de acuerdo a la masa del cuerpo celeste, pudiera ser atraído por nuetsra gravedad provocando un impacto de grandes consecuencias para la humanidad. Tal es el casod el asteroide Bennu, estudiado desde el año 2016 cuyo cuerpo rocoso 500 metros de diámetro se aproximaría tanto a nuestro planeta en el año 2035, que de ser atraído por la órbita terrestre podría chocar con la Tierra causando sin dudas un enorme desastre sin precedentes.

Los asteroides están en el espacio exterior y nada impide que alguno se acerque demasiado a nuestro Planeta. El último asteroide que pasó rozando la Tierra fue bautizado como el asteroide 2011 MD. Este asteroide rozó la superficie de la Tierra a una distancia de apenas 12.000 kilómetros, aproximadamente 30 veces más cerca que la luna.

Didynos, el asteroide que la NASA intentará desviar en el año 2022

Recientemente, se ha descubierto un gran asteroide denominado «Didymos» que pasará muy cerca de la Tierra en octubre del año 2022 y la NASA prepara una histórica misión que intentará desviar su recorrido cósmico.

Didymos está compuesto por dos cuerpos, una primera pieza de 780 metros de ancho y una segunda de 160. Por este motivo la agencia espacial quiere lanzar el proyecto DART, que impactará contra Didymos el año en que tiene previsto pasar cerca del planeta.

El choque tiene que ser lo suficientemente fuerte para desviar su trayectoria unos 0,4 milímetros y de esta forma sacarlo de su órbita, pero sin que llegue a destruirlo y genere una lluvia de pequeñas pierdas.

Después del impacto, la misión Hera de la Agencia Espacial Europea (ESA) estudiará los asteroides Didymos en 2026 para recopilar información clave de cara al futuro.

«Esto nos dará una buena estimación de la transferencia de impulso del impacto, y por lo tanto su eficiencia como técnica de desviación», explica el científico del proyecto Hera, Michael Küppers.

La piedra que usó para trabar su puerta durante 30 años valía USD 100.000

Ocurrió en Michigan, EEUU – Un vecino se enteró de que la piedra que usaba para trabar su puerta, era en realidad un meteorito valuado en USD 100.000.

El Museo Smithsonian y la Universidad Central de Michigan dijeron que el trozo de hierro y níquel que pesa poco más de 10 kilos es el sexto meteorito en cuanto a tamaño que se haya encontrado en Michigan.

David Mazurek dijo que llevó la piedra a la universidad luego de leer informes de que trozos de meteoritos se vendían por miles de dólares. «Me dije ‘A ver, a ver. Cuánto valdrá el mío'», declaró Mazurek.

La profesora universitaria de geología Mona Sirbescu había identificado primero la pieza como más que una simple piedra, pero envió dos muestras al Smithsonian para confirmación.

Mazurek dijo que el meteorito apareció en un granero que compró en 1988 en Edmore. El agricultor que le vendió la propiedad le dijo que cayó en su patio trasero en la década de 1930, añadió. «Dicen que lo tomaron inmediatamente después de oír un gran estruendo y que lo sacaron de un cráter», según Sirbescu.

Se están realizando análisis para determinar si la roca extraterrestre contiene elementos raros.

«Lo que típicamente sucede en estos casos es que los meteoritos pueden ser vendidos y exhibidos en un museo o vendidos a coleccionistas y revendedores que van por una ganancia», afirmó Sirbescu.

El Smithsonian y el museo mineral en Maine consideran comprar el meteorito.

Mazurek dijo que cuando se venda el meteorito donará una parte del dinero a la universidad.

«Ya no lo usaré como tope para la puerta. Busquemos un comprador», agregó.