¿Un planeta habitable?

El día 23 de abril de 2007 se decía que el hallazgo de ser confirmado puede marcar un hito en la historia, ya que los astrónomos piensan que han descubierto el planeta mas parecido a la Tierra fuera del Sistema Solar: un mundo que puede tener océanos líquidos y vida. Científicos suizos, franceses y portugueses encontraron que el objeto, apenas un 50 por ciento mayor que nuestro planeta, se encuentra moviéndose en órbita alrededor de una estrella enana roja, relativamente cercana a la Tierra.

Se piensa que la estrella puede tener otros dos planetas también.

El nuevo exo-planeta, como llaman los astrónomos a los planetas que giran alrededor de otras estrellas, no es idéntico a la Tierra. Por ejemplo, se estima que pesa tanto como cinco tierras, en parte debido a su mayor tamaño. Por la misma razón, tendría más de dos veces su área superficial.

Acompañan a este nuevo planeta otros (hoy sabemos que son cinco) orbitando a esta mediana estrella roja.

Históricamente, por cuestiones tecnológicas, solamente los exoplanetas grandes se podían detectar, aunque eso está cambiando.

Otras características curiosas del planeta son que la gravedad en su superficie sería alrededor dos veces más fuerte que en la tierra; y su año es apenas 13 días terrestres, pues da una vuelta alrededor de su Sol en ese tiempo. Es 14 veces más cercano a su estrella que nosotros de nuestro sol, (unos 11 millones de kilómetros).

Esto puede ser así porque su estrella, la enana roja Gliese 581, es más pequeña y fría que el Sol. El planeta sin embargo se encuentra en su región habitable- donde están las temperaturas necesarias para que el agua se encuentre en estado líquido.

Antes de seguir adelante debemos acotar que las estrellas Gliese, forman un conjunto de varias estrellas rojas o rojas anaranjadas, así, entre varias tenemos a:

Gliese 687, a 10,6 años luz de nos; Gliese 581, a 20 años luz de nos; Gleise628 (Wolf) a 14años luz; Gliese 1(GL1) a 14, 2 años luz de nos; Gliese 687 (LHS) a 14, 5 años luz de nos; Gliese 674 a 14,8 años luz de nosotros, etc. Para el que le interese ver: “Estrellas más chicas y cercanas a nosotros” en este blog.

La temperatura media de esta «Super-Tierra» esta entre 0 y 40 grados Celsius.

Los modelos predicen que el planeta debe ser rocoso como el nuestro. El agua líquida es crítica para la vida como la conocemos, dijo Xavier Delfosse, miembro del equipo de la Universidad de Grenoble, Francia. Debido a su temperatura y proximidad relativa, este planeta será el que más probablemente se utilice para la búsqueda de vida extraterrestre.

La estrella anfitrión, Gliese 581, está entre las 100 estrellas más cercanas a nosotros, apenas a 20,5 años-luz en la Constelación de Libra.

Gliese 581 tiene un tercio de la masa de nuestro Sol, su magnitud es 10,6 apenas visible con un telescopio de 10 cm de diámetro. Su temperatura corresponde a unos 2500 grados centígrados, mucho mas fría que nuestro Sol, y su luminosidad apenas alcanza la diez milésima parte de la de nuestra estrella.

Tales estrellas pequeñas, llamadas enanas rojas, son por lo menos 50 veces más débiles que el Sol y se cree que son estrellas muy comunes en nuestra galaxia. Entre las 100 estrellas más cercanas al Sol, 80 pertenecen a esta clase. Las enanas rojas son blancos ideales para la búsqueda de planetas porque emiten menos luz, y la zona habitable es así mucha más cercana a ellos dijo a Xavier Bonfils, co-investigador de la Universidad de Lisboa. Los planetas más cercanos a una estrella son más fáciles de detectar porque su gravitación afecta a su Sol más perceptiblemente.

Se espera que las enanas rojas también vivan muchísimo tiempo porque queman el combustible lentamente. Una enana roja de la mitad de la masa del Sol, como Gliese 581, brillaría típicamente por unos 130 mil millones años, sobreviviendo al Sol por trece veces.

En estos finales de septiembre de 2010, un artículo de D. Shiga en “New Scientist”, nos informa que un equipo de cazadores de planetas descubrió el primer mundo extrasolar que podría albergar vida en su superficie. Se encuentra a la distancia correcta de su estrella como para potencialmente contener agua líquida y podría tener una composición rocosa similar a la de la Tierra. Continuar leyendo «¿Un planeta habitable?»

Un planeta habitable y que da señales de vida

Descubren un planeta con condiciones apropiadas para la vida.

La noticia de la semana pasada fue que un grupo de científicos estadounidensen habían descubierto a unos 20 años luz de nuestro Planeta Tierra, un Planeta cuyas características particulares le permitiría albergar vida humana en un posible futuro. Se trata de Gliese 581 G, observado y estudiado por los científicos del Observatorio W. M. Keck, de Hawaii.

Dicho cuerpo celeste debe su nombre a que orbita sobre el sol de la constelación de Libra, denominado Gliese 581 y una de las características que lo harían ser el sucesor perfecto para contar con vida humana es su distancia al Sol en dicho Sistema Solar. Además, es muy probable que esten dadas las condiciones de agua líquida y gravedad similar a la de la Tierra para que exista una atmósfera.

Steven Vogt, uno de los investigadores del equipo, explicó que el planeta es tres o cuatro veces más grande que la Tierra y que tarda alrededor de 37 días en completar la orbita en círculos alrededor de su sol. Además, pareciera ser que tiene una zona cálida y otra helada, y es «probablemente» rocoso en algunas partes. Aunque destacó que a diferencia de la tierra, Gliese 581G no gira sobre su eje con lo cual existiría un lado completamente oscuro y o con amaneceres y tardeceres aunque nunca es de noche.

Señales de vida de la Contelación de Libra

Tras haber trascendido la noticia de éste nuevo «exoplaneta» habitable, el astrónomo australiano Ragbir Bhathal, recordó que durante el año 2008 logró captar una única señal luminosa procedente de la misma región del espacio en la que fue encontrado éste nuevo planeta.

En una reciente publicación del diario británico Daily Mail, se explica que Bhathal, quien también sería miembro del programa SETI, dedicado a la búsqueda de inteligencia extraterrestre, registró en diciembre de 2008 una extraña señal, difícil de explicar por causas naturales, pero que fue captado mucho antes de que se supiera de que Gliese 518 tenia en orbita a seis planetas.

Otros candidatos con las mismas posibilidades

En el año 2007, Stephane Udry y su equipo de astrónomos del Observatorio de La Silla, en Chile, habían descubierto el Gliese 518 c, el cual poseía grandes similitudes con la Tierra y era mostrado como el gran candidato a poder albergar vida fuera de nuestro Sistema Solar. Parece ser que en un futuro no muy lejano el Sistema Gliese 851 de la Constelación de Libra podría convertirse en una Colonia de Foráneos Terráqueos.

El gigante que sufre transformaciones

Generalmente miramos a los cielos y nos parece un espectáculo, generalmente inamovible. Por supuesto, a veces rasgados por estrellas fugases, naves aliens o algún eclipse.

Increíble, los astrónomos aficionados han descubierto anomalías en Júpiter, que han sorprendido.

La primera: Ha desaparecido la banda subecuatorial sud, como vemos en la foto superior varias veces más ancha que la tierra y decenas de veces más larga.

Ya hay una posible explicación, enfriamiento del Planeta, cambio en la circulación de los vientos y formación en el borde de la atmósfera de nubes de cristales de amoníaco.

(En la Tierra se forman altas nubes de cristales de agua).

Estas nubes cristalinas estarían ocultando a esta banda característica.

La otra anomalía son las bolas de fuego que surcan su atmósfera. El gran poder gravitatorio del mayor planeta de nuestro sistema provoca la caída abundante de asteroides no muy grandes.

La mayoría de los fulgores observados pueden ser asteroide de entre 10 a 100 metros de diámetro que generan explosiones similares a las de Tunguska, que algunos atribuyen o a una gran nave nodriza alien o a un meteorito.

Debido al equilibrio inestable de tantas masas, no es de extrañar que con tiempo, sus anillos, asteroides erráticos y sus satélites más cercanos terminen despedazándose y paulatinamente, cayendo sobre el gigante.