El fantasma de Paul Walker aparece en la grabación de Rápido y Furioso 8

Paul Walker, la estrella de la exitosa franquicia cinematográfica “The Fast and the Furious” (“Rápido y Furioso”), falleció el 30 de noviembre de 2013, luego que el Porsche de carrera GT en el que se movilizaba se estrellara a más de 160 kilómetros por hora contra un muro de concreto en la localidad de Valencia, en California, Estados Unidos. El rubio actor de 40 años, quien falleció en ese accidente de tránsito junto a su amigo y consejero financiero Roger Rodas, había alcanzado gran popularidad mundial gracias a su personaje de Brian O’Conner en las primeras seis partes de esa saga cinematográfica, dejando inconclusa su participación en la séptima parte de la franquicia (había grabado la mayor parte de sus escenas), la que sólo pudo terminarse usando el sistema de CGI que pudo reconstruir digitalmente la imagen de Walker para culminar las escenas que habían quedado inconclusas, dándole a su recordado personaje un despedida digna de un intrépido héroe de las carreras de autos.

Sin embargo, recientemente numerosos medios reprodujeron una insólita información: parte del equipo que se encuentra actualmente rodando la octava parte de la saga “Rápido y Furioso” habría visto al fantasma del fallecido Paul Walker deambulando por el set de grabación. Y para probarlo, los mismos medios reprodujeron una sorprendente fotografía donde puede verse la silueta transparente del actor, quien aparece de espaldas al lado del actor Vin Diesel, quien interpreta en la saga al audaz corredor Dominic Toretto, y de otros miembros del reparto. La noticia, por cierto, causó sensación en las redes sociales, aunque los más escépticos opinaron que sólo se trataba de un photoshop y de una estrategia de marketing de los productores para publicitar la octava película de la exitosa franquicia.

Gary Gray, el director de la película, relató por su parte que “ya han sido dos veces las que lo he visto. La primera vez sólo vi pasar su silueta y, por supuesto, creí que me había vuelto loco. Pero la segunda vez lo vi claramente parado frente al cofre del auto. Sé que era él, porque Paul era único e inconfundible”.

El preocupante retroceso de los glaciares patagónicos.

La temperatura media del planeta aumenta y los registros meteorológicos no paran de divulgar nuevas marcas. Si hay algo tangible de que lo que sucede es la retracción de los glaciares en el mundo. Los Andes no quedan fuera de ese fenómeno y las imágenes que lo demuestran son impactantes.

“Un valle de hielo se transformó en un lago. Son muy evidentes los efectos del cambio climático”. El testimonio es de Fabiano Ventura, un fotógrafo de montaña y medio ambiente italiano, que encabeza el proyecto internacional Tras las Huellas de los Glaciares, que describe el proceso que vivió el Upsala, en Santa Cruz.

Con la participación de fotógrafos especializados, científicos, alpinistas y un comité científico internacional (incluyendo investigadores de la Universidad de Roma La Sapienza y la Universidad de Milán La Statale), el proyecto combina comparaciones fotográficas e investigación científica con el objeto de analizar los efectos del cambio climático sobre los glaciares alpinos más grandes de la Tierra.

El Upsala, según fotografías aéreas de la NASA retrocedió desde 1968 10,4 km y su ancho se redujo casi a la mitad, de 4,1 a 2,6 km. Casi la mitad de su retroceso se observó en la última década. Y desde el 2009 a esta parte se perdieron unos 3 kilómetros de frente glaciar.

En la cordillera argentina el trabajo que rescató Ventura es el del cura salesiano Alberto María De Agostini quien entre 1910 y 1950 registró a estos gigantes de hielo en fotografías que se conservaban en el Museo de la Montaña de Turín y en el Museo Borgatello, en Punta Arenas, Chile.

“Viajamos a Chile porque los negativos de las fotografías estaban allí. Estuvimos una semana para estudiar la calidad de esta fotografía. La expedición se prolongó por dos meses y lo que más me sorprendió, además del retroceso glacial, fue que nos tocó muy buen tiempo con temperaturas no tan frías”, explicó a LA NACION.

El desafío de Ventura es tomar la fotografía en la misma época y desde el mismo ángulo que la del expedicionario que investiga. Las primeras tres expediciones del proyecto se realizaron en Karakorum en 2009, Mongolia; en el Cáucaso, al sudoeste europeo, en 2011 y en Alaska, en 2013.

El próximo desafío es el Himalaya, en 2018 y Los Alpes, para 2020, con los mismos objetivos y metodologías operativas de las primeras.

“Estuvimos tomando imágenes del cerro Fitz Roy, del Torre, del glaciar Upsala y del Ameghino. Tuvimos mucha ayuda de la gente de los parques nacionales en Chile y Argentina para poder realizar la expedición. La belleza y la grandiosidad impacta, pero también cómo han cambiado. Es hora de que todos tomemos conciencia”, sostuvo Ventura que llegó a la Patagonia en febrero para empezar con la aventura.

Luego de dos meses y de haber cubierto más de 2000 km en las regiones patagónicas de Chile y Argentina en busca de los lugares desde donde se realizaron originalmente las tomas de archivo, se unirá a un equipo de ingenieros y geólogos para la producción de modelos 3D del frente de los glaciares. Ello permitirá comprender mejor los efectos del cambio climático sobre el fenómeno del retroceso de los glaciares

Descubren una misteriosa bacteria asesina en EEUU

En los últimos meses, medio centenar de personas de Wisconsin han sido infectadas por Elizabethkingia anophelis, una bacteria que ha terminado ya con la vida de más de 20 personas, por lo que es muy importante localizar la fuente de la infección. La tasa de 30% de fallecidos es inquietante. Sin embargo, no está resultando nada fácil hallar el origen, pues la bacteria parece ser muy escurridiza.

La bacteria se introduce en el torrente sanguíneo del infectado, causándole problemas como fiebre, dificultad para respirar, escalofríos y problemas en la piel. Además, en pacientes ancianos, con afecciones anteriores o inmunodeprimidos puede llegar a provocar sepsis y, con ella, la muerte. La mayoría de pacientes que han muerto hasta el momento tenían más de 65 años y problemas previos de salud, pero no por eso deja de ser preocupante también para otras edades.

Todos los pacientes infectados proceden de 12 condados diferentes de Wisconsin. Algunos vivían en centros de mayores, otros se encontraban ingresados en el hospital y otros tantos vivían tranquilamente en su casa, sin haber recibido atención médica en los últimos días.

¿De dónde viene la bacteria?

Parece obvio pensar en el suministro de agua potable de Wisconsin, pero según declaró a Wired el director del Centro de Control de Enfermedades, ésta ya fue analizada y no parecía haber rastro del microbio. La situación invita a pensar en origen ambiental en algún elemento ampliamente compartido en la zona pero no se ha logrado identificar.

Así, la situación ha llevado a que un grupo de científicos se conviertan en verdaderos detectives e interroguen de uno en uno a todos los afectados, buscando algún hábito común entre todos: consumo de alimentos, uso de cosméticos, visitas a un mismo lugar, lo que sea. Por desgracia, de momento estos cuestionarios no han dado ningún resultado, por lo que se hace necesario tener en cuenta otras vías de transmisión.

Casi cien investigadores están trabajando juntos en busca del foco de la infección de la misteriosa bacteria asesina de Wisconsin.