Descubren un planeta relativamente cercano que puede ser habitable

Un equipo internacional de astrónomos ha descubierto dos planetas nunca observados hasta el momento que orbitan alrededor de la estrella de Kapteyn, una de las más viejas cercanas a nuestro propio Sol, a (solo) 13 años luz de la Tierra.

Uno de esos mundos se encuentra a la distancia adecuada de su astro como para albergar agua líquida en su superficie, lo que aumenta la deseada posibilidad de que pueda ser habitable. kapteyn-b La estrella de Kapteyn recibe el nombre del astrónomo alemán que la descubrió al finales del siglo XIX, Jacobus Kapteyn.

Es la segunda estrella más rápida del firmamento y pertenece al halo galáctico, un grupo de estrellas que orbita nuestra galaxia en órbitas muy elípticas. Con un tercio de la masa del Sol, esta enana roja puede ser vista con un telescopio de aficionado en la constelación austral de Pictor. Continuar leyendo «Descubren un planeta relativamente cercano que puede ser habitable»

Matemáticas, El último teorema de Fermat

Las matemáticas están llenan de problemas sin resolver por doquier, y los matemáticos lo único que hacen es pelearse por resolverlos primero. Uno de estos problemas sin resolver era el último teorema de Fermat, que fue planteado por Pierre de Fermat en el margen de la Arithmetica de Diofanto en el siglo XVII y que hasta 1995, finales del siglo XX, siguió sin solución que finalmente fue hallada por Andrew Wiles. Por ello actualmente al último teorema de Fermat se le llama también teorema de Fermat-Wiles.

Planteamiento del teorema

Fermat en su libro de Diofanto iba anotando al margen, así un día anotó el teorema:

Pierre de Fermat

Es imposible dividir un cubo en suma de dos cubos, o un bicuadrado en suma de dos bicuadrados, o en general, cualquier potencia superior a dos en dos potencias del mismo grado; he descubierto una demostración maravillosa de esta afirmación. Pero este margen es demasiado angosto para contenerla. Continuar leyendo «Matemáticas, El último teorema de Fermat»

El cambio climático, una posible causa de la caída del Antiguo Egipto

Un reciente hallazgo sugiere que un abrupto cambio climático como el que actualmente temen algunos científicos, podría haber destruido la antigua civilización egipcia.

Desde hace años los científicos debaten sobre qué es lo que llevó a la civilización egipcia al colapso hace más de 3.000 años, proponiendo hipótesis que abarcan desde guerras hasta una epidemia. Sin embargo, el reciente estudio de unos anillos de árboles encontrados en la madera del ataúd de Ipi-ha-ishutef y de unos barcos funerarios enterrados cerca de la pirámide de Sesostris III sugiere que cambios en los recursos e infraestructuras alimentarios pusieron fin a este mundo antiguo.

Las muestras de los anillos revelaron una pequeña e inusual anomalía después del año 2200 a. C., la cual, según una investigación paleoclimática, podría corresponder a un breve episodio de sequía. Stuart Manning, profesor de la Universidad de Cornell de Nueva York, supuso que este episodio climático podría haber tenido importantes consecuencias políticas: un cambio en el clima fue suficiente para alterar los recursos alimentarios y otras infraestructuras, lo cual probablemente llevó a la caída de civilizaciones como el Imperio acadio y el Antiguo Reino de Egipto.

«Estamos exactamente en la misma situación que los acadios: si de repente algo alterara el modelo estándar de producción de alimentos en grandes áreas de EE.UU. nos encontraríamos ante un desastre», afirma. Además, añadió el científico, «este indicio muestra que el cambio climático no tiene por qué ser tan catastrófico como una Edad de Hielo para causar destrucción».