La cultura Maya y sus 7 profesías.

La historia de los Mayas sigue siendo, aún en la actualidad, un misterio indesifrable. Sucede que durante la conquista de América, los colonizadores, en busca de riquezas y poder, destruyeron gran parte del legado cultural de las civilizaciones Precolombinas y por ese motivo, quedan muy pocos documentos históricos para estudiar a éste y otros pueblos mesoamericanos. Quizás uno de los más antiguos y misteriosos de la historia fueron los Mayas. Se conoce que fueron grandes científicos, aún en sus limitaciones tecnológicas y lograron realizar cálculos matemáticos sorprendentemente exáctos, su calendario era muy preciso, con una año de 365 días y poseían un sistema de numeración vigesimal que incluía el 0 (cero), por lo que podrían haber realizado cálculos lo suficientemente complejos. Una de las cuestiones que más llama la atención a los investigadores modernos, son las siete profesías de los Mayas.

En un elaborado calendario, muchos dicen que es el más exacto de todos los tiempos, los Mayas aseguraron que la Tierra habría nacido un 13 de agosto del 3114 a.c, y que luego de exactamente 5125 años, el planeta llegará a un gran cambio de Era, un tiempo en que muchos consideran como el verdadero Apocalipsis y otros, como un cambio de conciencia colectiva de los hombres.

Las 7 Profesías Mayas.

Primera Profesía Maya:

El mundo de odio y materialismo terminará el sábado 22 de de diciembre del año 2012 y con ello el final del miedo, en este día la humanidad se tendrá que escoger entre desparecer como especie pensante que amenaza con destruir el planeta o evolucionar hacia la integración armónica con todo el universo, comprendiendo y tomando conciencia de todo esta vivo y que somos parte de ese todo y que podemos existir en una nueva era de luz.

Segunda Profesía Maya:

Esta anunció que todo el comportamiento de la humanidad cambiaría rápidamente a partir del eclipse de sol del 11 de agosto de 1999. Ese mismo día ocurría, al menos, una parte de la profesía. Un anillo de fuego se recortaba contra el cielo, fue un eclipse sin precedentes en la historia, por la alineación en cruz cósmica con centro en la tierra de casi todos los planetas del sistema solar, se posicionaron en los cuatro signos del zodíaco, que son los signos de los cuatro evangelistas, los cuatro custodios del trono que protagonizan el Apocalipsis de San Juan.

La tercera profecía Maya:

Esta profecía dice que una ola de calor aumentará la temperatura del planeta, produciendo cambios climatológicos, geológicos y sociales en una magnitud sin precedentes, y a una velocidad asombrosa; los mayas dicen que el aumento de la temperatura se dará por varios factores, uno de ellos generado por el hombre que en su falta de armonía con la naturaleza solo puede producir procesos de auto destrucción, otros serán generados por el sol que al acelerar su actividad por el aumento de vibración produce más radiación, aumentando la temperatura del planeta.

La cuarta profecía de los Mayas:

A consecuencia del aumento de la temperatura causado por la conducta antiecológica del hombre y una mayor actividad del sol, se provocará un derretimiento en los polos.

Quinta profesía de los Mayas:

Esta profecía nos dice que todos los sistemas basados en el miedo sobre lo que se fundamenta nuestra civilización se transformarán simultáneamente con el planeta y el hombre para dar paso a una nueva realidad de armonía.

La sexta profecía Maya:

En los próximos años aparecerá un cometa cuya trayectoria pondrá en peligro la existencia misma del hombre, los Mayas veían a los cometas como agentes de cambio que venían a poner en movimiento el equilibrio existente para que ciertas estructuras se transformen permitiendo la evolución de la conciencia colectiva, todas las cosas tienen un lugar que les corresponde en todas las circunstancias, aún las mas adversas son perfectas para generar comprensión sobre la vida para desarrollar conciencia sobre la creación, por esto el hombre se ha enfrentado constantemente a situaciones inesperadas que le generan sufrimiento, es un modo de lograr que reflexione sobre su relación con el mundo y con los otros, así a lo largo de muchas vidas comprenderá las leyes universales de la razón de la creación, para los Mayas, Dios es la presencia de la vida que tiene todas las formas y su presencia es infinita.

La séptima Profecía Maya:

Esta profecía Maya nos habla del momento en que el que el sistema solar, en su giro cíclico, sale de la noche para entrar en le amanecer de la galaxia. Durante los 13 años que van desde 1999 al 2012, la luz emitida desde la galaxia sincroniza a todos los seres vivos y les permite acceder voluntariamente a una transformación interna que produce nuevas realidades. Todos los seres humanos tienen la oportunidad de cambiar y romper sus limitaciones, recibiendo un nuevo sentido: La comunicación a través del pensamiento, los hombres que voluntariamente encuentren su estado de paz interior, elevando su energía vital, llevando su frecuencia de vibración interior del miedo hacia el amor, podrán captar y expresarse a través del pensamiento y con el florecerá «el nuevo sentido».

Misterios: En busca del eslabón perdido

NUEVA YORK (Reuters) – Científicos presentaron el martes los restos fosilizados de un primate hallado en Alemania, que habría vivido hace 47 millones de años y que podría ser pariente cercano de un antepasado común a los monos, simios y humanos.

El fósil primate es el más completo que se haya encontrado. Sólo le falta una pierna desde abajo de la rodilla y podría dar indicios sobre una etapa temprana de la evolución de los primates, dijeron científicos.

El paleontólogo noruego Jorn Hurum, quien lideró a un equipo de científicos que analizó el fósil durante los últimos dos años, comentó que podría parecerse a uno de los primeros ancestros de los humanos, pero que no es probable que haya sido un antepasado directo.

«No estamos tratando con nuestra tatara-tatara-tatara-tatarabuela, pero quizás con nuestro tatara-tatara-tataratía», explicó Jens Franzen, del Senckenberg Research Institute en Frankfurt, a reporteros en el Museo Estadounidense de Historia Natural, en Nueva York.

El primate, que mide 58 centímetros, desde la punta de la nariz hasta el final de su cola, era hembra y murió antes de cumplir el año de vida, dijo Hurum. Fue llamada Darwinius masillae en honor a Charles Darwin, quien estableció la teoría de la evolución, pero recibió el apodo de Ida.

El fósil fue hallado en 1983 por un coleccionista aficionado, en la fosa de Messel, al sudeste de Frankfurt, en donde se han encontrado varios fósiles más.

Ida permaneció en una colección privada hasta que fue comprada por Hurum y la Universidad de Oslo en el 2006.

Los antepasados directos de los humanos «deben haberse visto parecidos», comentó Hurum.

«Esta es la última pista que tenemos acerca de cómo se veían», dijo. «Pero siendo prudentes como científicos (…) por supuesto no estamos planteando que éste es nuestro ancestro directo. Eso es demasiado», agregó Hurum.

«Es realmente, realmente difícil decir con exactitud en este punto quién dio origen a los humanos», precisó.

Ida se vincula a los humanos por el hueso del talud en su tobillo, que tienen exactamente la misma forma. Los científicos dicen que sus dedos gordos del pie opuestos y la presencia de uñas, en vez de garras, confirman que fue primate.

Los científicos fueron capaces de analizar los contenidos del intestino de Ida, que mostraron que comía semillas y hojas.

Los descubrimientos fueron publicados en la revista PLoS ONE de Public Library of Science.

(Editado en español por Ricardo Figueroa)

Huellas del pasado

El proyecto, que se desarrolla de manera conjunta en colaboración entre las dos instituciones, lo han presentado hoy en la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) científicos de ambas entidades.

Se trata de un estudio que permite dar a conocer y registrar las huellas que los dinosaurios dejaron sobre la tierra hace millones de años, y para hacerlo se han escogido zonas donde la presencia de estos animales prehistóricos se ha hecho evidente a partir de los hallazgos efectuados a lo largo de los últimos años.

Para ello, se han cubierto las zonas candidatas a ser Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en España y Portugal, como son Pedra da Mua, Galinha y Vale de Meios, en Portugal, y El Frontal, Era del Peladillo y Los Cayos, Las Cerradicas y Tereñes, en España. El estudio se ha elaborado gracias a una nueva tecnología denominada LiDAR que permite obtener imágenes en tres dimensiones y con una alta calidad de percepción de la superficie de una área determinada. Se trata de un sistema de cartografía digital que escanea el terreno en tres dimensiones, frente a los antiguos sistemas, que se basaban en fotografías, dibujos o esquemas, todos ellos en dos dimensiones, que no aportaban más datos que los observables a simple vista.

«Esto nos permite ver las huellas de los dinosaurios en tres dimensiones, calcular y medir parámetros como por ejemplo la profundidad o los ángulos existentes entre los dedos», ha explicado Bernat Vilà, miembro del Instituto Catalán de Paleontología. Los primeros estudios que desarrollaron conjuntamente con la Universidad de Manchester fueron en el yacimiento de Fumanyà, en la comarca barcelonesa del Berguedà, que ya empezaron en el 2005 a trabajar codo a codo en la investigación de estos prehistóricos animales. Gracias a la tecnología que brinda LiDAR, se obtienen modelos tridimensionales del terreno con una resolución que permite obtener una exactitud milimétrica de alta precisión y hacer estudios morfológicos de las pisadas. «La información que nos ofrecen estas pisadas es muy importante para dar explicación a los movimientos de un esqueleto e imaginar cómo era cuando estaba vivo», ha manifestado Phill Manning, miembro de la Universidad de Manchester.

En este sentido, obtener la información de las huellas y poseer el esqueleto de la misma especie permite reconstruir el movimiento del animal, a la vez que encajar huesos y pisadas a partir de su peso al andar. A partir de la pisada se puede determinar el movimiento del dinosaurio, hacia dónde cargaba el peso, la masa muscular y las dimensiones del animal, pero también si se movía en solitario o en manada. «El sistema nos da información en cuanto a calidad, cantidad y diversidad», explica Manning, que destaca el gran valor que tiene la Península para poder estudiar el paso de los dinosaurios en la historia, desde su aparición hasta su extinción. La obtención de estos datos, que estarán al alcance de los paleontólogos para su estudio y aplicación, permitirá además que no queden borrados con el paso del tiempo y por las inclemencias meteorológicas, «las mismas que han permitido que la tierra se erosione y lleguen a nuestros días», detalla Manning.