Para su edición de septiembre la revista National Geographic Magazine se dedicó a recorrer las zonas del planeta con mayores índices de crecimiento de los niveles del agua.
BIRTHDAY CANYON, GROENLANDIA – En la actualidad es un pequeño cauce, pero su superficie se ha empezado a derretir en una preocupante señal del verano. (Foto por James Balog, Extreme Ice Survey/National Geographic)
A menos que cambiemos dramáticamente de curso en los próximo años, nuestras emisiones de carbón crearán un mundo muy diferente -geográficamente hablando- a aquel en que nuestras especies evolucionaron. Con la actual cantidad de industrias, la concentración de dióxido de carbono en la atmósfera alcanzarán unas mil partes por millón al final de este siglo, afirma Gavin Foster, geoquímico de la Universidad de Southampton, Reino Unido.
TIENGEMETEN ISLAND, HOLANDA – Una casa abandonada permanece de pie en una zona inundada de la isla Tiengemeten, sur de Holanda, donde el gobierno rompió los diques intencionalmente para crear un aspecto salvaje poco convencional en un país moldeado por los humanos. (Foto por George Steinmetz/National Geographic)
Tales concentraciones no se han visto en la Tierra desde la era del Eoceno, hace unos 50 millones de años, cuando el planeta estaba totalmente libre de hielo. El nivel de los mares en una Tierra sin hielo podría ser de hasta de 65,8 metros de alta a lo que es en la actualidad.
MANTOLOKING, NUEVA JERSEY – Para la época en la que ‘Sandy’ llegó a la zona, ya había cobrado la vida a 72 personas en el Caribe. Ya no era un huracán, pero tenía mil millas de ancho,vientos de 80 mph y la aún una fuerza devastadora. El saldo final fue de 147 fallecidos. (Foto por George Steinmetz/National Geographic)
Tomaría unos mil años y más de mil partículas de CO2 por millón para llegar a ese punto, pero si quemamos todos los combustibles fósiles, estamos condenados a ello. (…) Para el próximo siglo, sino antes, una masiva cantidad de personas deberá abandonar las zonas costeras de Florida y otras partes del mundo.
IJBURG, AMSTERDAM – Pequeños muelles y corredores unen las casas flotantes construidas sobre este lago al este de Amsterdam. Aseguradas con pilares deslizantes y vigas de acero, las casas pueden subir y bajar durante las épocas de inundaciones y tormentas. (Foto por George Steinmetz/National Geographic)