El testimonio presentado aquí, forma parte de una de las entrevistas relizadas por los investigadores de The Disclosure Project.
La entrevista original se puede encontrar en inglés, pero se agradece la traducción al español hecha por el forista dasfaker de la web emule.us
En su testimonio, sabremos que los Estados Unidos no sólo tienen dispositivos de propulsión antigravedad operacionales, sino que los han tenido por muchos, muchos años, y han sido desarrollados a través del estudio, en parte, de vehículos extraterrestres durante los últimos cincuenta años.
Adicionalmente, tenemos los dibujos del inventor aeroespacial Brad Sorensen de los dispositivos que vio, así como un esquema de uno de esos vehículos de reproducción alienígena – con un detalle destacable.
Así que, volviendo a la historia de Brad en Norton: una de las otras cosas que dijo fue que después de enseñarles todos estos aparatos, había una gran cortina negra que dividía el hangar en dos zonas diferentes. Detrás de esa cortina había otra gran área, y dentro de ella todas las luces estaban apagadas, de modo que entraron y encendieron las luces, y allí había tres platillos volantes flotando sobre el suelo – sin cables que les suspendiesen del techo, y sin ruedas sobre las que se apoyasen – simplemente flotaban sobre el suelo. Tenían pequeños expositores con cintas de vídeo en funcionamiento, que mostraban al más pequeño de los tres vehículos asentado sobre un desierto, presumiblemente en el lecho de un lago seco – un lugar como el Área 51. El vídeo mostraba al vehículo haciendo tres pequeños y rápidos saltos; después, aceleró hacia arriba hasta desaparecer de la vista en un par de segundos – sin sonido, sin boom sónico – nada.
Tenían una ilustración recortada, muy parecida a la que te mostraré ahora, en la que se veían cuáles eran los componentes internos de este vehículo, y tenían algunos de los paneles retirados de modo que podían ver a través de ellos tanques de oxígeno y un pequeño brazo robótica que podía extenderse hacia fuera desde un lateral del vehículo para recolectar muestras y cosas. De modo que, obviamente, éste es un vehículo que no sólo es capaz de volar por la atmósfera, sino que es capaz de salir al espacio y recolectar muestras, y que utiliza un tipo de propulsión que no hace ningún ruido. Hasta donde él pudo ver, no tenía partes móviles y no expedía ningún tipo de gas de escape o de combustible – simplemente estaba flotando.
Todos eran idénticos en tamaño y proporciones, excepto que tenían distintos tamaños. El más pequeño, en la parte más ancha, era plano por debajo, con un poco de forma de campana, y tenía una cúpula o media esfera en la parte superior. Los lados tenían una pendiente de unos 35 º desde la vertical.
Los paneles que estaba alrededor de la falda habían sido retirados, de modo que pudo ver uno de esos grandes tanques de oxígeno dentro. Fue muy específico al describir los tanques de oxígeno como de 16 a 18 pulgadas de diámetro, de unos 6 pies de largo, y estaban orientados radialmente, como los radios de una rueda. La cúpula que era visible en la parte superior era en realidad la mitad superior de un gran compartimiento para la tripulación con forma de esfera que se encontraba en el medio del vehículo, y alrededor del centro del vehículo había un gran bastidor de plástico que tenía ese gran conjunto de bobinas de cobre dentro. Dijo que eran de unas 18 pulgadas de ancho en la parte superior, y de unas 8 o 9 pulgadas de grosor. Dentro tenía tal vez entre 15 y 20 capas apiladas de bobinas de cobre.
La parte inferior del vehículo era de unas 12 pulgadas de grosor. En ambos casos, la bobina y ese gran disco del fondo eran como una gran bastidor de plástico – un plástico transparente, azul verdoso, o pudo haber sido cristal. Deduje, utilizando mis habilidades de artista conceptual, que había exactamente 48 secciones como finas porciones de una pizza, y cada sección de ese bastidor pesaba probablemente entre cuatro y cinco toneladas, a juzgar por su grosor y diámetro. Debía tener un peso monstruoso. Estaba lleno de placas de cobre de media pulgada de grosor, y cada una de las 48 secciones tenía 8 placas.
Así que, aquí estamos de nuevo con los condensadores de placas, y la perspectiva de que alguien encontró una manera de utilizar el efecto Biefield-Brown – ese efecto de levitación donde cargas un condensador para que se eleve hasta la placa positiva. Ahora bien, cuando tienes ocho placas apiladas, alternan entre ellas. Va así; negativo positivo, negativo, positivo, negativo, positivo – cuatro veces, de modo que finalmente acabas con las placas positivas siempre sobre las placas negativas según vas hacia arriba.
Dentro del compartimiento de la tripulación había una gran columna que iba desde el medio hacia abajo, y había cuatro sillas eyectables motadas espalda con espalda en la mitad superior de esa columna. Después, justo en el medio de la columna, había una rueda volante de algún tipo.
Bien, esta nave era lo que ello llamaron Vehículo de Reproducción Alienígena; también era conocido como el Flux Liner. Este sistema de propulsión antigravedad – este platillo volante – era uno de los tres que había en el hangar de Norton. Su sistema de visión sintética utilizado era el mismo tipo de tecnología que tienen en el helicóptero Apache para el sistema de armamento. Si el piloto quiere ver detrás suyo, puede escoger una vista en esa dirección, y las cámaras giran en parejas. El piloto tiene una pequeña pantalla enfrente de su casco, y le da una vista alternativa. También llevan un pequeño conjunto de gafas – de hecho, actualmente puedes comprar un sistema de visión en 3D para tu videocámara que hace lo mismo – de modo que cuando mira a los lados, obtiene una perfecta visión del exterior en 3D, pero sin ventanas. Entonces, ¿por qué no tienen ventanas? Bien, probablemente es porque los voltajes de los que estamos hablando, utilizados en este sistema, probablemente oscilaban entre, digamos, medio millón de voltios y un millón de voltios de electricidad.
Bien, empecé a mirar el diseño de esta cosa, y se me ocurrió que lo que estaba viendo era una gigantesca bobina de Tesla, que es una especie de transformador abierto. Lo que sucede cuando pasas electricidad a través de esa bobina de gran diámetro, es que creas un campo.
Esto es lo que hace el sistema: coge electricidad, utilizando dos grandes baterías de tipo marino de 24 voltios. Esto lo utilizas básicamente para poner de algún modo una corriente alterna a través de esas bobinas. Después, intensificas esa electricidad mediante la bobina secundaria, que está en la columna del medio, y obtienes este voltaje extremadamente alto. Puedes seleccionar el voltaje que quieres en cada uno de esas 48 secciones de condensador.
¿Por qué querríamos hacer esto? Si utilizas una bobina de Tesla normal, normalmente tendrás uno o dos condensadores en todo el sistema. Pero aquí estamos hablando de un tipo de condensador distinto – un condensador hecho a base de placas – placas que tienen forma de triángulos largos y finos, y que están orientados radialmente del mismo modo que los radios de una rueda, al igual que los tanques de oxígeno, al igual que las líneas de campo de esa bobina de gran diámetro. Según miras al sistema, si eres electricista o alguien que sabe un poquito sobre bobinas de Tesla y del modo en que están hechas, empiezas a darte cuenta de que la orientación de los componentes es realmente la clave para hacer que el sistema funcione.
¿Entonces qué pasa? Divides el disco en 48 secciones distintas, y después puedes decidir cuánta electricidad quieres poner en un lado u otro, de modo que puedes controlar la cantidad de electricidad y la cantidad de empuje y el vector que obtienes. Puedes hacer que vaya directamente hacia arriba, que gire, que se incline – lo que quieras, por el mero hecho de que puedes controlar a dónde va la electricidad dentro de esos 48 sectores. Si coges un círculo y lo divides en 48 secciones iguales, verás que son en realidad porciones muy finas. De modo que tenemos esos 48 condensadores, y una gran bobina de Tesla. Tienes que tener algún tipo de disparador rotatorio, algo parecido al distribuidor de los coches, que envíe la electricidad a cada una de esas secciones. Posteriormente, también hay que tener algún medio para controlar cuánta electricidad va a cada una.
Bien, cuando Brad describió el sistema de control, dijo que a un lado había un gran potenciómetro de voltaje – como un reóstato, un gran controlador. Te permite poner progresivamente más electricidad a través del sistema según giras el potenciómetro. Al otro lado del sistema de control, había una especie de barra metálica que subía hacia arriba como un cuello de cigüeña, y en la punta había una especie de bola metálica. Enganchada a esa bola había como un cuenco que parecía colgar de la parte inferior de la bola, como si estuviese unido magnéticamente a la bola. Dijo que todo el conjunto estaba suspendido en el aire, como el ancla de un gran barco en el océano, flotando en el agua. Estaba literalmente en un mar de energía.
Brad describió el hecho de que la columna central tiene una especie de cámara de vacío en ella. La cámara de vacío es una de las cosas que describen todos estos científicos en esas unidades de sobre-energía o energía libre que construyen. Todos ellos tienen algún tipo de tubo de vacío, tecnología de vacío.
Brad mantenía que dentro de esta gran cámara de vacío de la columna central que estaba en todo lo demás – dentro de la rueda volante, dentro de las bobinas secundarias de la bobina de Tesla, dentro del compartimiento de la tripulación – había vapor de mercurio. El vapor de mercurio conduce la electricidad, pero produce todo tipo de efectos iónicos. Estas pequeñas partículas de mercurio se cargan de maneras inusuales, y si lanzas una enorme cantidad de electricidad a través del vapor de mercurio que se encuentre en una cámara de vacío parcial, algo especial e inusual sucede en ese proceso.
Brad dijo que en la exhibición en la base de Norton, un general de tres estrellas mencionó que esos vehículos eran capaces de llegar a la velocidad de la luz y más. Ah, por cierto, el más grande de esos vehículos tenía entre 120 y 130 pies de diámetro (40 metros). Es decir, era gigantesco si piensas en ello.
De cualquier modo, lo único que puedo decir, es que cuando estuve hablando sobre el sistema de control de fibra óptica, ésa es una de las cosas que nos lleva de nuevo a la historia original de Roswell, donde algunos testigos afirman haber visto estas pequeñas fibras que eran atravesadas con luz, y que no pudieron explicar qué era aquello. Bien, ¿por qué iban a necesitar un sistema de fibra óptica en una nave espacial? Si, repentinamente, todo dentro del vehículo sufre una cancelación de masa, e incluso los electrones sufren esa cancelación de masa, significa que toda la telemetría que tienes en el sistema se volvería loco. Sería como si, repentinamente, el sistema pasase a través de un cambio de fase, y todo se volviera superconductor. De modo que tienes que tener alguna forma de mantener el mismo nivel de control en los “spark gaps” – el control de la cantidad de electricidad que pasa a través de los condensadores – de modo que cuando muevas el timón, tengas la misma cantidad de movimiento y desviación en el sistema, incluso cuando está en un estado de cancelación de masa total o parcial, porque los electrones también la sufren, de modo que se convierten en circuitos superconductores.
¿Por qué utilizar fibra óptica? Porque los fotones no tienen masa, por lo tanto no se ven afectados. Esto significa que la información, cualquier telemetría que envíes desde y hacia la computadora, llegue a su destino. No importa si la computadora funciona a un nivel de superconductor, porque simplemente la hace más rápida, mas eficiente e inteligente. Quieres ser capaz de controlar la nave de modo que no se estrelle, ¿y cual es la mejor forma de hacerlo? Con fibra óptica.
Como verás, no sólo tienen la tecnología, están desarrollando la tecnología. No sólo vuela, sino que parece lo mismo que la patente presentada en los años 60 – el mismo año que las fotografías tomadas cerca del Área 51 – entre el Área 51 y Provo, UTA – por un piloto militar. Muestran las mismas características; todos tienen las mismas formas. Así que, para mí, la parte central es que sin importar si entiendes los detalles técnicos de esta tecnología, la tecnología existe y hay gente que la ha visto. Yo mismo he visto cosas, de modo que pienso que es sólo cuestión de tiempo que saquen esta tecnología de los proyectos secretos y nos permitan utilizarla para cosas como la producción de energía no contaminante.
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