Pozo Gravitatorio

“Buscando realizar un Pozo gravitacional”

Como vimos en el artículo “Experiencias con la gravedad” y en “Busca del 0 Absoluto”, la humanidad deberá pensar en los movimientos giroscópicos y en las temperaturas más extremas, tratando de lograr los cambios de estados liminales que puedan catapultarnos eficientemente a las estrellas. Explicaré porque asumo esto.

Sabemos que los vectores químicos usados ya por más de cien años (desde el inicio de la cohetería moderna), pese a permitirnos llegar con humanos a la Luna y con sondas robóticas más allá de los confines del Sistema Solar, no nos cabe dudas a todos que son tan onerosos como imprácticos en su operación. Una expedición rápida a Marte insumiría al menos dos años. Ir algo más lejos, casi una vida con todos los problemas y riesgos enormes –amen de otras muchas dificultades – que esto implicaría.

Por lo tanto es perentorio, que a imagen y semejanza de los OVNIS, construyamos naves capaces de los portentos de navegación y velocidad que ellos producen.

En el primer artículo describía las velocidades de rotación necesarias para no tener peso y como tener “peso negativo” respecto a la forma y el diámetro, los cambios de dirección y la posibilidad de elevarse sobre la eclíptica, logrando espacio limpio para desarrollar grandes velocidades de empuje y de frenado evitando choques a enormes velocidades.

Con la búsqueda de inercias térmicas sobre- existenciales para lograr el cero absoluto se operará el cambio de estado que genere un “pozo gravitacional”, que combe el espacio- tiempo y que juntamente con la velocidad lograda con el primer dispositivo nos haga caer al destino que pasa a estar de lejano a cercano por este plegamiento.

Esto sucederá cuando los electrones caigan sobre los núcleos atómicos y la materia se circunscriba a un virtual punto contenido. (Posiblemente, todos neutrones y neutrinos no emitidos).

Confinar este procedimiento dentro de una nave será un gran problema, aun mayor que el que presupone mantener la estructura del conjunto giroscópico en las rapidísimas velocidades angulares necesarias.

Manejar estos viajes dentro del plegamiento presupone tecnologías impensadas para un viaje en un mundo cambiante segundo a segundo. La administración de los diversos tiempos suponen cálculos y variables copiosas. En fin, tecnologías a encontrar y desarrollar en varios siglos de constante superación, donde los habitantes de la Tierra tendrán por necesidad ser extraordinariamente hábiles y constantes. Presupone esto un «milagroso» cambio drástico en la calidad humana poblacional. Pero esto será motivo de varios artículos.

En la práctica, estas operaciones permitirían recorrer distancias de varios años luz en un muy corto tiempo.

Estaríamos dentro de dos burbujas, la primera generada por la “acción giroscópica” y la segunda “espacio- temporal” al plegar el espacio –tiempo alrededor de la nave.

Se produciría en estos momentos un nuevo efecto, atravesaríamos muchos universos «paralelos», en tanto viajáramos en el plegamiento. Sería así también una verdadera máquina del tiempo. (Ver «De vectores y otras yerbas»).

Sobre este tema, doblo la apuesta. Me gustaría que los que creen estar de algún modo conectados, comenten sobre ello.

Nikola Tesla predijo el celular hace cien años

Nikola Tesla, uno de los inventores más importantes de la historia moderna, con sus más de 1000 (muchos de ellos desconocidos), predijo en el año 1909 la existencia de teléfonos celulares. Cien años atrás, en un artículo del New York Times, Tesla afirmó:

El tercer párrafo del citado periódico dice así: «Pronto será posible, por ejemplo, que un hombre de negocios en Nueva York dicte instrucciones y que éstas aparezcan instantáneamente escritas en Londres o cualquier otro lugar. Este hombre podrá hacer llamadas desde su escritorio y hablar con cualquier persona en el mundo suscrita al teléfono. Solamente será necesario llevar un instrumento no muy caro, no más grande que un reloj, el cual permitirá a su portador escuchar en cualquier sitio, ya sea en tierra o agua, a distancias de miles de millas. […] La canción de un cantante, el discurso de un líder político, el sermón de una importante personalidad religiosa, la conferencia de un hombre de ciencia, todos podrán tendrán una audiencia repartida por todo el mundo.»

Predicciones para un futuro cercano

Como anticipáramos en otro artículo Energías Alternativas, con el advenimiento de la nueva broca – mecha de hidrógeno – oxígeno, que permitirá utilizar el calor interno de la Tierra, para ir atenuando el advenimiento de la nueva glaciación, al tiempo de aprovechar esas energías para aprovecharlas en los emprendimientos de la civilización humana, además permitirá un importantísimo quehacer humano en los próximos siglos: el CONTROL AMBIENTAL

En que consistirá este control ambiental? Con el aprovechamiento de las energías enormes del planeta interno y luego de lo que emana del Sol, posibilitará con los descubrimientos científicos que se lograrán en «cascada», en parte por la inteligencia humana y en gran parte por la inteligencia artificial, se podrá, sobre los pronósticos climatológicos, ir proponiendo cambios puntuales, según las necesidades agrícolas y varias.

Con los procesos de contracción espacio temporal, el control climático será simple.
Las condiciones electro- magnéticas producirán los efectos buscados.
El control de la biomasa, será también puntual.
Se podrá modificar a voluntad el espesor de la corteza terrestre, para así tener por siglos una «calma tecnológica» en lo referente a los cambios tectónicos.
Será este paso el necesario para proseguir en el ascenso de la civilización.
Todo este avance permitirá el siguiente paso: alcanzar las estrellas, mancomunarse en la civilización universal y constituir la hermandad de civilizaciones.