La mayor insertidumbre, radica en que los científicos no son capaces de relacionarlo con ningún lanzamiento concreto, aunque algunos sospechan que puede tratarse de una parte de un cohete Protón ruso lanzado en octubre de 1974 para analizar la Luna. Dificilmente puede tratarse de un objeto expulsado desde la tierra y del cual no existan registros a nivel mundial, por lo que si no se encuentra el origen es posible que se trata de un objeto de fabricación extraterrestre.
El 2010 KQ fue descubierto el 16 de mayo de 2010 por el telescopio Catalina Sky Survey. Orbita el Sol una vez cada 1,04 años y pasó a menos de 1,28 distancias lunares de la Tierra el 21 de mayo. El astrónomo Richard Miles, del telescopio Faulkes North, se dio cuenta de que el extraño «ovni» tenía un color y un brillo que solo la mano del hombre podría provocar además de una órbita circular y de muy baja inclinación. Los espectros en ultravioleta demostraron también la existencia de dióxido de titanio, utilizado en la fabricación de pintura blanca.
hasta el momento se cree, sin mucha certeza, que el artilugio es la «cuarta etapa» de un cohete Protón ruso lanzado el 28 de octubre de 1974 por la sonda Luna 23. Esta nave tenía como misión recoger muestras lunares para su posterior estudio, pero el alunizaje fue muy violento y parte del equipo quedó dañado. La pieza que ahora se ha convertido en un asteroide artificial puede ser un bloque equipado con un motor 11D-58S que medía casi seis metros de longitud.
Este objeto es muy interesante. Pagaría por analizarlo en la Tierra.